De

Como de poco se hace mucho,
de lo mucho nada,
de la nada algo nuevo
y lo nuevo viejo.
De la noche la mañana,
de la primavera tan llena de vida
al triste otoño teñido de café;
que parece guardar recuerdos de un ayer.
De la calma una tempestad,
de entre la lluvia, truenos y relámpagos
un silencio anunciando casi el fin
y la llegada del arco iris.
De entre simples palabras
se llene ese corazón
que en instantes se sintió vacío
se sintió olvidado.
De entre tanto que escoger
a veces no se decide bien
pues el corazón se deja llevar
sin importarle el perder.
De entre migajas se alimenta,
de noches llenas de éxtasis,
de amaneceres, de camas vacías,
de falta de besos de despedida .
Es como de gota en gota se llena un vaso.
Así se va llenando
con pequeñas cosas
es un limosnero
que resulta más que millonario de amor.
Amor que dar, que demostrar
sin importar el receptor
que más que ladrón involuntario
como siempre se cataloga
nos convierte a nosotros
en un loco donador.