A esa desconocida
Eres en pocas letras la reina de mi noche,
el fin de la esperanza siempre verde
contra el firmamento azul y negro.
de tu cabello disperso.
Ya te encontré y te busco todavía,
no sabría si hallarte en Nueva York o Tokio,
pero me consta que habitas
estas superficies de asfalto oscuro
y paredes de vidrio contra el horizonte.
Hablas tantos idiomas que apenas te conozco,
llevo una foto tuya en mi mano y te busco.
en este caminar te comparo con otras
que cruzan indiferentes a mi búsqueda.
en sus coches eléctricos, de sur a norte.
Nos hemos encontrado varias veces de noche.
pero llevamos prisa y nos decimos: Hola;
a veces sonreímos a nuestra propia sombra.
que dobla las esquinas después de nosotros.
A veces desespero y renuncio a buscarte.
y me voy a la cama, y me acuesto con otra.
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Autor:
maurix salgado (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 9 de julio de 2024 a las 02:28
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna, jvnavarro
Offline)
Comentarios1
Un poema muy bien trabajado con un cierre muy en consonancia con el tema explicativo del poema. Me ha gustado
Un saludo y abrazo
Gracias mi estimado poeta, jnavarro, este es un tema recurrente en mis poemas, esa mujer imaginada e idealizada en busca de nuestra compañera ideal, hay quienes comentan que la han encontrado yo me resisto aceptarlo, ya que a medida que el tiempo pasa voy agregando a mi mujer ideal cualidades que solo existen en mi atolondrado corazon. Aprecio su comentario.
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