Infieles

Seguiré siendo yo, siempre.

No tengo que avergonzarme.

Porque en cierto modo controlo. Aunque no lo parezca. Puedo hacer lo que me plazca.

Y me veré envuelta en más de un lío... y a lo mejor podré explicarlo, y a lo mejor no. Aunque un día lo explicaré. Espero.

Y no me arrepiento. Aunque a veces... me pesa.

Y no puedo cambiar lo que soy, porque en el fondo, me gusta...

Seguiré navegando en mis secretos, ahora más secretos que nunca.

Y no me importa que sigan renaciendo  en mí, una y otra vez,  porque para mí ya no son un obstáculo…al contrario, me encanta verme renacer…y renacer…

Ahora te busco, con la diferencia de que sé que sabes lo que hay.

Siempre ando queriendo lo que no puedo tener, y lo que tengo, me sobra.

Lo sé, soy una mala persona porque no me privo de nada.

La ansiedad de vivir me provoca deseo…y el deseo, hace que no sea capaz de pensar si lo que hago, me perjudica.

Dos vidas, es complicado.  

Sobre todo cuando cada una de esas vidas te apasiona…

Y puedo quedarme sentada muchos días, esperando que el tiempo decida por mí, pero el tiempo pasa de largo, y ni siquiera me ofrece una pequeña tregua.

Y así vivo... dejando que todo lo que quiera pase por mí. Por mis venas…

Los que entran, los alejo, y los que se alejan, los persigo, para que permanezcan... Me indigna volver con las manos vacías.

Sí, es verdad, no soy capaz de verte con coherencia.

Si te miro, te veo a través de mis ojos.

Y se que tú, formas parte, de mi forma de ver las cosas.

Pero entonces dejo de verme a mí misma.

Y después, quiero volver a verlo todo, pero no puedo...

Mis enganches, siempre perjudiciales. Me obligan a desprenderme de ti.

Mis lazos, me duelen, siempre que intento avanzar.

Me duelen tanto, que me salen por los ojos...

Pero no avanzo, nunca avanzo, sigo siendo la misma de siempre.

Y tú también, aunque después te eche de menos, porque no quiero nada, aunque lo pida todo.

Mi afecto, se pega tanto a ti, que me desborda, y por más que lo intento, no puedo desprenderme.

Te quiero. Aunque no me creas...

Pero ahora voy a marcharme, necesito estar sola, para despejarme.