Cómo se nos va la vida

La vida se nos va cuando, queriendo hacer algo que amamos, lo dejamos pasar por alto,  

cuando pudiendo abrazar a alguien, nos limitamos, y no decimos las cosas a tiempo.

La vida se nos va cuando no somos nosotros mismos, y tratamos de ser otro para agradar  

a un fulano, y a fulana que ni le importamos. 

 

La vida se nos va cuando miramos pasar los años, quedándonos perplejos  

ante las crisis y ansiedades cotidianas, ¡se nos va!

 

La vida se nos va cuando vemos a esa chica y no nos atrevemos a decir lo que sentimos,  

cuando dejamos que el miedo hable por nosotros, silenciando nuestros corazones nos mantenemos en un silencio sepulcral.

 

La vida se nos va cuando, mirando las cicatrices del pasado, dejamos que el presente  

se escape, a merced de cualquier situación que lo seduzca.

 

La vida se nos va en los momentos no vividos, en los sueños no perseguidos,  

en los abrazos no dados, en las palabras no pronunciadas.

 

La vida se nos va cuando permitimos que el reloj dicte nuestros pasos,  

sin detenernos a disfrutar de los pequeños milagros de cada instante.

 

La vida se nos va cuando nos perdemos en la rutina, olvidando que cada instante  

es una oportunidad para ser felices, para amar, para vivir plenamente.

 

No dejemos que la vida se nos vaya en los "hubiera", o en   "mañana tal vez",  

en los "tal vez". Vivamos hoy, sin miedo, sin reservas, con el corazón abierto.

Porque la vida se nos va, y solo queda el recuerdo de lo que no hicimos,  

de lo que no dijimos, de lo que no vivimos.