Estaba tan solo, tan frio, tan callado, ahora se lo que se siente morir pues fue agonizante la ausencia de amor pues se desvaneció lo poco que quedaba de mi; Hacia mucho frio pero ni una flor en mi tumba había, donde estabas tu que decías amarme?, donde estabas tu que decías ser mi amigo?, nunca nadie llego a tocarme el hombro y consolarme, estaba totalmente íngrimo mientras me tomaba por los cabellos lloriqueando como bebé, falsa melodía quemante de pájaros que no estaban, que vigilaba entonces mis pecados?, eh experimentado el abandono y la muerte tal vez fue un simple sueño o un adelanto de mi muy mal terminar, ojala que el día que ya no escriba y mis ojos se cierren me dejes un par de flores y platiques conmigo, ojala que cuando mueras, me abraces y entremos al cielo mas te mentiré y dejare en la entrada del paraíso pues nunca fui creyente, soy hereje, pero si existe un paraíso me alegrare en las llamas por el pecado mayor, no por negar al mesías si no por ser libre.
- Autor: Albayeros ( Offline)
- Publicado: 19 de julio de 2024 a las 01:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna, Lucía Gómez
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