Amigos, esta narración es real, nada ha sido imaginado.
El Morro y el Wajkal son sinónimos de un rico pasado de nuestros pueblos indígenas en Centroamérica y el sur de México.
El morro es un árbol cuyo fruto, lleva el mismo nombre, parece una calabaza a primera vista pero no crece a flor de tierra como la calabaza y sus variedades.
Por favor ver imágenes.
El vocablo Wajkal también conocido como Guacal o Huacal de origen Nahuatl, es el recipiente que se obtiene al partir el morro por la mitad, extraer su fruto y ponerlo a secar y pulir las orillas de la corteza, el cual es resistente como un buen plástico que no se derretirá con calor.
Este recipiente tiene multiusos en el hogar, principalmente para agua. Pero también se usaba para tomar café y atoles.
El guacal es el único recipiente que usábamos en mi niñez para darnos baños. El agua estaba en un barril o tonel y uno extraía el agua con los guacales, y se bañaba a guacalazos.
Así era en el campo y en hogares pobres. Sabíamos de regaderas, pero era de la gente adinerada.
Yo salí de Guatemala hacia los Estados Unidos sin nunca haber tenido una regadera propia.
Toda mi vida me bañé a guacalazos.
De la misma manera, nunca tuve electricidad, refrigerador o televisión, en mis últimos años antes de salir de Guatemala, un vecino que tenía su propia cuenta de electricidad en su casa, me pasó un cable eléctrico, y así tuvimos luz, yo le daba exactamente la mitad del pago mensual.
Para ver televisión se pagaba unos pocos centavos a quienes vendían la oportunidad de ver un programa en blanco y negro, no había mucha opción, solo habían 3 canales de televisión en Guatemala. Había que traer su propio banquito para sentarse, y era de cupo limitado.
Tuve mi primer televisor en Estados Unidos, al igual que mi primer carro.
Más de medio siglo después regreso a mi pueblo jubilado, con un atractivo ingreso para estándares locales, solo para descubrir que debido a sobre población y agotamiento de recursos, el agua es escasa y solamente llega por unas horas al día, y muchos ciudadanos tienen que colectar su agua en toneles, barriles, tanques caseros y contenedores plásticos.
¡Y heme aquí, bañándome a guacalazos de nuevo!
Todos los días recurro al bendito guacal, y es como si nunca me fui de mi tierra.
¡Y lo atesoro!
Tommy Duque
Jun 22 2024
Puerto Barrios, Guatemala.
Copyright Derechos Reservados.
- Autor: Tomasito (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de julio de 2024 a las 00:07
- Categoría: Carta
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: MISHA lg, María García Manero 🌸, JacNogales, jvnavarro, Antonio Martín, Pilar Luna, Freddy Kalvo, Ivette Urroz
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