Desde el corazón

Hola, recién despierto y en la mesa solo hay un café. 

Que tal tu día y las noches sin poder dormir?

Seguro hueles bien, sos muy hermosa cuando intentas sonreír.

Pero quería pedirte, que despiertes y vengas junto a mí.

Perdón sin fuí esclavo de mi error, si partí en mil pedazos tu bello corazón, tu siempre fuiste la única que me alegraba el corazón. Dudé de tí hasta que entendí que no había nadie como tú.

Abre los ojos, mi dulce amor, tan precioso es tu pelo enredado, terciopelo, mi locura es mirarte como te reís.

No soy yo el que necesita, ni eres tú la que complica el amarnos hasta el fin.

Somos uno de la mano que camina como hermanos, sin miedo a ser feliz.

Tú eres mi apoyo y sin ti me derrumbo, ven a mí, porque te amo demasiado, dejé todo para estar hoy junto a tí.

Solo espero que despiertes y me digas que me quede, solo abrazame y dame otra oportunidad.

Mi princesa eres tú, si me quieres yo te iré a buscar