Se cayó al precipicio del cinismo
al pensar que lo oculto siempre oculto
y escondido se exhibe con lo culto
del perfil al mostrar protagonismo.
Se cayó el pedestal de la grandeza
quien con título regio presentaba
las magníficas cátedras que daba
al mostrar de su ingenio con firmeza.
Que se fue, que si vuelve, que la "eñe"
escondida sin cara en el intento
de pensar, y pensando en la escritura.
Que si vuelve a caballo, aunque se preñe
la verdad del porrazo en el momento
para usted, su Ilustrísima Finura.
Crystal CG.
- Autor: ♦Crystal CG♦ ( Offline)
- Publicado: 17 de septiembre de 2024 a las 09:57
- Comentario del autor sobre el poema: ¡Ja! No pasa nada. Gracias por su amable visita. Saludos.
- Categoría: Cuento
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: Sami Sanz, Antonio Pais, Scarlett-Oru, EmilianoDR, Freddy Kalvo, Lualpri, jvnavarro, Elthan, Rafael Escobar, Rafael Huertes Lacalle, La Bruja Irreverente
Comentarios7
Merecido se lo tuvo.
Suele suceder.
Gracias, poeta.
Gracias, Sami, por tu amable visita.
Saludos.
Jaja!! Espera... qué me he perdido.
Genial diatriba Crysty 👍👍👍
Apapachos!!
En algunas novelas raras que leo se usa la frase "se cayó del caballo" para referirse a que se le cayó un chaleco ilustre (una identidad oculta). El chiste se cuenta solo.
Te cuento más tarde, que ahora estoy peleando con el vestido para la ceremonia del grito en mi escuela.
Así lo entendí, pendiente quedo entonces... 😀
Disfruta de la ceremonia!!
Te está queriendo decir, que la Ibáñez (u sea yo) anda de nuevo por el portal, que no se fue, que sigue aquí. Quien no tiene nada que hacer, mata moscas con el rabo.
Jajaja!!! Pues cartas boca arriba entonces 🙂
Fíjate que no he entrado en tu perfil hasta ahora. Como solo lo hago para ver poemas viejos o comentar en el muro, voy a tiro hecho...
A ver Merche, que si lo hacen con sonetos satíricos como este hasta a mí me parecería bien, pues es el modus operandi de la poesía desde siempre: ataque-réplica-contrarréplica-recontrarréplica... y así hasta que sea la propia poesía la que salga victoriosa del entuerto, o del odio mutuo como en los sonetos entre Quevedo y Góngora.
Nunca me enfadé ni cosas de estas me supieron mal, lo que me gustaría es saber de donde le viene a esa persona ese odio hacia mí, ya hace un par de meses más o menos, también sufrí un ataque suyo sin saber porqué.
Por otra parte cerré mi otra cuenta para no mezclar esta etapa que he iniciado con la IA, con mis obras personales. En esta cuenta ando experimentando con la IA y para los que interese pueden mirar para comprobar si he usado esta cuenta para halagarme o hacerme estrellitas en la otra,. En fin, como dice el maestro, Cada loca con su tema.
Y por lo que dices de replica y contra replica, siempre lo hice, pero en este caso esta digamos señora, por decir algo, me bloqueó a la primera de cambio, o sea que lo suyo nos es a estilo de Góngora y Quevedo sino a mala leche.
Y lo que me llama la atención no es el hecho de que se pueda pensar si soy Eloísa o perico de los palotes, que hasta es posible que esta pájara ni se refiriese a Eloísa, lo que me llama la atención es ese interés hacia mi persona. Creo que la leyenda sobre mí dice que menospreciaba a la gente, ahora circula por ahí una bruja irrepelente o algo así, que trata a todos de mediocres y vulgares y le están riendo las gracias. Al fin si van a conseguir que me marche pero va a ser asqueada de tanta pelandrusca.
Grito Mexicano en un cuento que he disfrutado y entre letras sigo buscado para encontrar la moraleja.
Gracias Crystal.
Gracias por la visita.
Salud.
Jajaja...aquí en El Salvador se ha puesto de moda una frase: "El que entendió, entendió"...jajaja.
Un abrazo fraterno mi apreciada amiga Crystal.
Esa frase me gusta, la uso con mis hijos... Jajaja
Saludos, colega.
Gracias por la visita.
me parece adivinar pa q gallinero fue ese palo (como decimos en Argentina), y con mucha belleza poética
Nunca había escuchado ese dicho, pero acá en México hay uno que se le parece. Saludos, Santiago. Gracias por la visita.
Con franqueza decir puedo
que mi pluma se babea,
porque escribiendo gotea
al reirse con denuedo.
De Góngora y de Quevedo
recordaba su pelea,
con tu soneto que ondea
cual banderín en el ruedo.
Con magnífica prestancia
las íes muy bien puntuaste;
y luciendo tu elegancia
a tu Góngora dejaste
desangrando su arrogancia
con los versos que afilaste.
Mis felicitaciones mi apreciada amiga.
Gracias, maestro, por dejarme tus versos como comentario.
Abrazo.
Vengo aquí a maullar: Miau.
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