Dios es empleado en un mostrador

Vogelfrei



Sui Generis - Confesiones de invierno

Me echó de su cuarto, gritándome
"No tienes profesión".

 

 

Otra vez sacude el hambre,
corrompiendo las ideas,
hasta dejar ya sin muelas
la dentadura del hombre.

Corroyendo todo el cobre,
destruyendo toda suela,
y dejando de secuela
cuanto nos cuesta ser pobre.

 

 

 

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Comentarios +

Comentarios7

  • EmilianoDR

    Cuanto cuesta la pobreza apreciado Volgelfrei.
    Saludos y gracias.

  • María C.

    Y en pleno siglo XXI se ve mucha pobreza y muchos mendigos...es increíble no avanzamos.
    Un saludo

  • David Arthur

    Un abrazo amigo Vogelfrei

    David

  • Violeta

    Relativamente muy cierto lo que narras, saludos.

  • FABIO BOHORQUEZ RODRIGUEZ

    Sentidas letras.

    Un abrazo.

  • Elthan

    Breve que motiva a reflexionar. ¡ Ah, la pobreza ! Ese verdugo silencioso que destroza sin piedad, no solo el cuerpo, sino también el espíritu. Aquí no hay espacio para la compasión burguesa o el consuelo fácil. Es decadencia, no solo material, sino moral. Pero quizás, en este sufrimiento, surge la posibilidad de algo más, en un mundo donde la pobreza no solo afecta lo material, sino también la dignidad y las ideas.

    Saludos Vogelfrei.

  • gaspar jover polo

    Encantador poema dentro de la tradición satírica popular. O al menos esta impresión me produce.



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