Recojo el sentir de unas palabras
y las amoldo y dejo caer
tal si fueran el agua clara
de una gran y fresca cascada.
Por aquí se oyen cantares
que salen del hondo del alma
y es que el mar trae aromas
de tierras lejanas y extrañas.
Ya un sentir se ve jalonar
por las lomas de las verdes montañas.
Crecen en los fructíferos sueños
especie de praderas de tiernas algas.
En la sien se clava el pasar de las horas
que se mueven en una esfera de reloj
de oro y plata su maquinaria.
y las amoldo y dejo caer
tal si fueran el agua clara
de una gran y fresca cascada.
Por aquí se oyen cantares
que salen del hondo del alma
y es que el mar trae aromas
de tierras lejanas y extrañas.
Ya un sentir se ve jalonar
por las lomas de las verdes montañas.
Crecen en los fructíferos sueños
especie de praderas de tiernas algas.
En la sien se clava el pasar de las horas
que se mueven en una esfera de reloj
de oro y plata su maquinaria.
Todo cambia
cuando un arlequín salido de un cuadro
juega a saberse de este poema
la alegría que se plasma
en las inocentes miradas,
de los niños que juegan
con las espumas blancas,
de las olas que se acercan
hasta ese lugar en el que el poeta
cierra una libreta por falta de ganas.
cuando un arlequín salido de un cuadro
juega a saberse de este poema
la alegría que se plasma
en las inocentes miradas,
de los niños que juegan
con las espumas blancas,
de las olas que se acercan
hasta ese lugar en el que el poeta
cierra una libreta por falta de ganas.
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Autor:
jvnavarro (
Online) - Publicado: 13 de agosto de 2024 a las 02:49
- Comentario del autor sobre el poema: El mar desde la playa y yo sentado en una silla playera observando totalmente relajado como el tiempo pasa. En este poema se describe la visión de un largo transcurrir del tiempo delante del mar. Ideas cortas y diversas y alrededor de ello la figura de un arlequín, cuadro este que estuvo en la habitación en la que yo dormía de pequeño en casa de mis padres. Era una reproducción muy lograda del cuadro de Picasso, "El arlequín" y alrededor de ello, en el poema, la estampa de los niños jugando. El mar intentando no sucumbir a no ser un Mar Muerto por aquello de que si algún día pasara este suceso, la humanidad misma se podría en ese punto de no retorno. Los mares de Marte sujetos a lo incognito, son la referencia posible de un futuro que bien visto puede llegar a ser cierto. No ser por allí como cuadraría mi estancia, ni el de las olas, niños, especies marinas y menos la del arlequín. Un saludo
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 2
- Usuarios favoritos de este poema: Vogelfrei
Online)
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