Acero aterrorizado en la noche, sin la geometría del hambre,
sangre plutocrática derramada en la tinta de un eslabón perdido,
como un reloj trágico con pechos flácidos, vírgenes y vacíos.
Una cosa tras otra, débil bajo las heladas viajeras, en el
garito intacto de la explotación, incubadora de sueños rotos,
super-hembra, hija de figuras bramantes,
oculta tras las cosquillas antes de que el látigo azote.
Levitando como la lengua bruta de las catedrales,
o como un río de sabiduría esquelética que no distingue
el amanecer entre distancias transparentes,
ni se deja engañar por la hojarasca susurrante donde escanciarse.
Movimientos de números esquivos, tus noches leves;
mis nubes de extravíos, desolación lenta y constante,
mirada petrificada, extinta entre la muerte,
languidece más pujante donde renuncia
a labios enamorados del dolor, se niega al lecho fantasmal
de un oleaje indolente, y como un relámpago de agonía te busca,
en pesadillas de corazones trizados por la negación,
plegaria prodigiosa de ruidos escondidos,
bocina inquietante, sin compromiso,
que exige mi entrega en medio de lo amargo,
en tempestades de puntería aguda y precisa.
- Autor: Ivette Mendoza Fajardo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de agosto de 2024 a las 21:19
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema es abstracto, como todos los poemas que escribo.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: Vogelfrei, Tommy Duque, Scarlett-Oru, José Valverde Yuste, Pilar Luna, Sergio Alejandro Cortéz, alicia perez hernandez
Comentarios2
Un estilo muy particular versando INTENSAMENTE.
Saludos
gracias, saludos
SALUDOS
Me encanta tu versar Ivette Urroz. Un abrazo con la pluma del alma
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