No existe deuda en la dicha rogada,
tan solo dar gracias por nuevo día,
tan solo las gracias por armonía,
no existe deuda por la fe adeudada.
No existe deuda ni voz obligada,
tan solo dar gracias por melodía,
tan solo las gracias por compañía,
no existe deuda ante humilde mirada.
No existe deuda por el sentimiento
que en el pequeño altar un alma implora,
pues llega tu luz con oros y argento.
No existe deuda de tu voz rectora,
que es la palabra de base y cimiento,
mas quedo con vos, paciente y deudora.
Dime Madre, en dónde yo te oraría
si mi alma me responde;
en qué lugar, mil gracias yo daría.
En qué jardín se esconde
tu consuelo, tu gracia, tu armonía.
Ay Madre, dime dónde,
que hacia allí correría..
Dime Madre.....
Jhet
- Autor: Fany María ( Offline)
- Publicado: 17 de agosto de 2024 a las 12:22
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: Sergio Alejandro Cortéz, ElidethAbreu, Antonio Pais, Pluma de Fuego, CARLOS ARMIJO R...✒️, Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna
Comentarios2
Me ha conmovido la sinceridad con la que hablas de la gratitud en este poema. Es un recuerdo de que la verdadera riqueza está en la armonía y la conexión humana, no en las deudas o las obligaciones. ¡Tus palabras resuenan con una profunda belleza!
No existe deuda de tu voz rectora,
que es la palabra de base y cimiento,
mas quedo con vos, paciente y deudora.
Querida poeta, gracias por esta belleza.
Abrazos.
Gracias a ud. por sus palabras.
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