La luz de las estrellas
ilumina tenue,
los cuerpos de los amantes clandestinos
que se han congregado,
lejos de las miradas repulsivas,
de las miradas compasivas,
de los reproches.
Ellos, juntos,
transitan libres y gobiernan
en el mundo que han formado
y el tiempo, cómplice,
se vuelve inmóvil,
indiferente, ajeno.
Incontables palabras se unen,
formando románticas cascadas,
excepcionales afluentes musicales,
que cautivan y embriagan sus sentidos,
y se enraízan
en sus corazones agitados.
Sus ojos descubren,
cada vez que descansan en sus cuerpos,
atractivos lugares ignorados,
minuciosamente exploran,
olvidando sus pudores.
Sus manos,
revolotean,
como aves hermosas,
alrededor de sus cuerpos
de fragancias exquisitas y misteriosa.
Complacencia recíproca,
sin premuras, sin censuras.
Desprendido despliegue
de ímpetus desenfrenados,
incontenibles…locura.
POR: ANA MARÍA DELGADO P.
- Autor: ANA MARIA DELGADO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de octubre de 2010 a las 00:16
- Categoría: Erótico
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: ChefsitoLove, isabel., rocker slash
Comentarios5
sabes me lo guardo 😀 muy bellas letras 😀
MUY BUENA POESIA..
SUTIL....
BELLAS LETRAS..
ABRAZO.....
bonitas palabras ana, y muy gustoso en leerlas
suerte
kuidate
XD
by by
ME AGRADO MUCHO HABER ESTADO ENTRE TAN TIERNAS Y DULCES LETRAS...
SALUDOS
Un paraíso como ese
no es añil, es paraíso
solamente, con el friso
un poquito sombreado
con tinte acaramelado
para que todo tuviese
la placidez y el calor
demandante del amor
de quien alli estuviese
arrullando su fervor.
Ego sum
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