**~Novela Corta - Alas Rotas~**

Novela Corta: Alas Rotas

Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez Sánchez

Seudónimo: EMYZAG

Comenzada: 14 - 16 (31) de julio - 21 de agosto de 2024…

Publicada: 21 de agosto de 2024…

Terminada: 21 de agosto de 2024…

Editada: 21 de agosto de 2024…

Mi #24 de novelas cortas en el año 2024…

Mi #179 de novelas cortas hasta el año 2024…

7019 Palabras 10 Páginas

~ * ~Sinopsis:

~ * ~Tina posee alas rotas y no sabe que para volar sólo tiene que sentir el alma y más en su propia imaginación querer alzar el vuelo y volar hasta que lo aprende una vez y ya no es la más lerda del colegio…  

Sucesos:

1. Tina en el colegio es la más lerda de todas las estudiantes del colegio…
2. Tina se encierra en su habitación por lo sucedido…
3. Tina se ve en la encrucijada en querer volar lejos y no sabe cómo volar lejos de allí…
4. Tina dice que posee alas rotas… y no puede volar…
5. Tina sabe una de dos cosas: el que tiene alas sabe cómo volar y el que no tiene alas rotas…
6. ¿Cómo Tina arregla a sus alas rotas para volar lejos de allí?...
7. Tina tiene un sueño de cómo abrir alas rotas y tratar de volar lejos de allí…
8. Tina sabe una de dos cosas que es ella o sus alas rotas…
9. Tina trata de volar, pero, algo la detiene…
10. Tina vuela lejos y con sus propias alas sin ser rotas… porque Tina sabe volar desde que tuvo aquel sueño…

Tina es una joven lerda que sólo quiere ser la chica popular en el colegio. Ella siente en su alma que ser lerda le afecta su conducta si ella desea ser una chica liberal y encontrar al verdadero amor. Tina es la estudiante más lerda del colegio. Ella va de camino hacia el colegio. Tina es una joven de cabellos de color marrón y de ojos color café, desea ser una muchacha feliz. Tina quiere ser feliz, pero, su verdadera vida es diferente. Ella es una muchacha joven, pero, muy tonta en comparación con las otras estudiantes del colegio. Cuando, ella va de rumbo hacia el colegio, un joven muy apuesto se dispone a apreciar el camino y el destino junto a Tina, pero, en el trance de la verdad que a Tina se le cae la cara de vergüenza cuando le ocurre un imperfecto momento con su falda colegial de camino hacia el colegio. La falda de Tina se ha enredado entre los arbustos del colegio y se ha deshilado de tal forma que quedó casi desnuda y frente a ése chico muy apuesto cuando se le ha caído la cara llena de vergüenza. Tina logra llegar al colegio así casi desnuda por el contratiempo con su falda colegial, sólo les dice a los presentes que… -¨disculpen por el mal sucedido…¨-, y Tina se dirige al baño a arreglar todo el susto que ha pasado desde que su falda se ha deshilado por completo y desde aquel arbusto. Tina se ve en la encrucijada en marcharse a su hogar o quedarse allí mismo y tomar clases para luego marcharse lejos a su hogar a llorar por todo lo lerdo, lo sucedido y el maltrecho de los instantes en que el recelo de la vida se da como lo más lerdo de la vida. Si en el trance de la inocua verdad y tan impoluta certeza se ve Tina entre dos y tres buscando en el alma un sólo desafío frío como que el invierno quedó como un gran otoño cuando caen las hojas secas de un árbol, el cual, se atormenta más la forma en querer solventar que la vida como llega y atormenta queda claramente adherida a la forma en ser una joven lerda con sus propios juegos de la vida misma. La falda remendada y ya no hay más forma de tener otro accidente fatal cuando en el alma de Tina se vio aferrada entre escombros de una sola salvedad cuando se disculpa con todos y más con ése chico guapo que le acompañó y más que eso Tina se aferra al frío en poder creer en el trance perfecto de la obligación en pertenecer al club de honor del colegio, pero, Tina es una muchacha buena, muy decidida y muy inteligente, pero, es lerda. Cuando Tina a la verdad que el silencio se debe a que en el colegio se relajan aquel momento en que llegó al colegio con la falda deshilada cuando a Tina le ocurre un mal percance y un delirio autónomo en percibir en el alma una luz que casi trasciende hacia la vida misma con ese accidente y que la dejó lerda como la misma estupidez que le ocurre. Las estudiantes del colegio le hacen ¨bullying¨ a Tina con esa falda colegial y fue una estudiante que comenzó y ahí es que todo comienza en enredar el trasfondo inocuo cuando en el juego del alma y en ser más lerda que antes se aferra el deseo efímero como el deseo inocuo en atreverse nunca a enfrentarse a ese cuadro de jóvenes estudiantes que comienzan a realizar ¨bullying¨, a Tina. Y Tina decidida en tratar en volar hacia lo lejos del cielo, pero, queda inerte e insostenible cuando ser lerda no hay mucho qué hacer y qué decir si las palabras desaparecen de su vocabulario aunque tenga un 100% alto en IQ´S. Tina decide ser lerda sin tratar en echar a volar lejos de la pura realidad de que ese grupo de jóvenes le está haciendo ¨bullying¨ y más frente a ése chico apuesto, muy inteligente y el joven le dice a Tina que… -¨te queda muy bonita la falda remendada¨-, y Tina cree en pajaritos preñados con la ilusión de que algún día hallará al verdadero amor como las ilusiones con ése chico que le expresa dicho comentario acerca y después del accidente con su falda colegial. Tina se siente encarcelada, atrapada, y muy insípida cuando en el tormento se aferró al frío y al desastre de convivir con el grupo de jóvenes, de las cuales, ninguna la ayuda en nada, si al contrario le quitan todo. Tina es la estudiante más lerda de todo el colegio cuando las jóvenes se aferran a la idea en realizar ¨bullying¨ a todas las jóvenes del colegio. A Tina le ocurre lo que discurre y lo que más transcurre cuando el tiempo es sólo su propio aliado y más que eso cómplice de la única verdad de que ya es hora de salir del colegio. 

Tina llega a su casa, un hogar donde no existe el mínimo amor entre dos padres que cada uno cumplen con lo suyo y las cosas llegan hasta ahí. La vida de Tina es ser una muchacha lerda, por la cual, se aferra hacia el mismo instinto en sublevar el alma como tratar de volar lejos de allí de ese hogar sin amor, pero, sólo siente en su pecho el dolor más indeleble de todos los tiempo en que el reloj calma las horas en sentir el naufragio de su propio instinto en ser lerda y más nada. Cuando Tina llega a su hogar y cumple con lo establecido en querer solventar la razón inocua, de un perecer dentro de su propio hogar cuando arde como el tiempo o como los celos dentro del mismo corazón. Tina recorre el hogar con su falda remendada y nadie se da cuenta de lo que le ha ocurrido a la muchacha, pero, a la muchacha no lo extraña si así son todos en el hogar de Tina. La jovenzuela llamada Tina sólo se encierra en su habitación en crear, creer, soñar y echar volar muy alto y volar lejos del suelo, pero, lo único que ella sabe es que es lerda, muy tonta y con lo sucedido quedó en maltrecho de un momento casi vergonzoso. Cuando Tina se encierra en la habitación para pensar qué va a hacer, si tratar de volar o dejar todo como está. Tina va de rumbo a analizar su vida, la confección de su falda colegial  y hasta de ese grupo que realizan ¨bullying¨, y no sabe cómo detener el alboroto que forman por hacer ¨bullying¨ a cualquier estudiante. Tina es lerda, pero, muy intransigente como el dolor que posee desde su propio corazón cuando, cerca de la verdad, se siente como el pasaje de ir y venir lejos de la realidad y a la verdad que queda sin alas que puedan volar lejos sintiendo en su débil alma una resaca fuerte desde su propio interior. Tina en su habitación se convierte en una muchacha fuerte, decidida y muy parca en el recelo de la verdad cuando arde el deseo de vivir sobre las fuerzas autónomas de dar una sola solución a ese problema tan difícil que le aqueja en contra de ese grupo de estudiantes que realizan ¨bullying¨ en el colegio. Tina, se acerca la hora de saber que debe de bajar al comedor a comer en su hogar. Tina hace, porfía y puede hasta jurar que no está en un verdadero hogar con la única desfachatez de ser hipócrita como el rumbo a perseguir o pertenecer a ese grupo que realiza el ¨bullying¨ en el colegio. Tina sabe una cosa y es que su rumbo no caduca, no expira ni dice cuando o hasta donde llegar con sus alas que vuelan lejos, si ella trata de volar lejos y olvidar cada cosa ocurrida en su corta existencia. Tina corre en ser como el deseo o como las venideras tormentas en poder creer que el destino se aferra hacia lo más incierto de un instinto sosegado por perder como siempre en la pelea, o camorra ideal de toda su vida. Tina desea converger en el tiempo como esperar a que el tiempo transcurra como las horas que vuelan sin tiempo, sin caducar ni expirar el tiempo. Tina desde su habitación cree en no poder volar lejos de ese rumbo o dirección que la vida escogió para ella. Y Tina sustentó que el cielo es inalcanzable, el tiempo y las horas vuelan como ave rapaz y que ella, sólo, posee alas mojadas y rotas cuando, no halla cómo volar lejos y ni tan siquiera se atrevería en tratar de volar lejos de allí. Tina encerrada por lo sucedido en el colegio se transformó en una campeona, en una débil, pero, fuerte ave rapaz capaz de volar en paz siendo depredador y no presa de nadie como lo fue algún día de ese grupo del colegio realizando ¨bullying¨. Tina se entregó en cuerpo y alma a la idea, a la conveniencia en poder creer que posee alas mágicas y no alas mojadas ni rotas y lo intenta una vez más desde su habitación, pero, cae rendida ante tanto pavor y temor incierto de creer que no podrá volar lejos nunca más. Tina quedó como el transcurso vivo y como el derecho en querer sobrevivir a ese mundo incierto.

La joven llamada Tina intenta volar lejos de allí, no lo consigue ni aún lo aprende, decide navegar a ver si consigue lo que trató de conseguir, pero, ni, aún, así pudo sentir las olas ni al mar ni tan siquiera vio al mar ni al puerto seguro, sólo, vio oscuridad y trató discernir cuando las alas quiebran por tanto dolor en el alma de Tina. Y se dijo una vez más que tratará de llevar alas porque eso conlleva volar por los mares, por los montes, por las praderas y llanos también. Y Tina se dijo una vez más que luego tratará de ver al mar y al lago y al cielo donde desea ser el ave rapaz más decidida en consistir y tratar de volar lejos de allí mismo como el ave vuela lejos destronando la calma y subiendo al pináculo con o sin bruma de todo un mar desértico cuando en el cielo quedó como inalcanzable y muy adherida a sus deseos y más a sus pies sabiendo que sin los pies puede volar lejos de allí y lo intentó nuevamente, pero, no pudo aún. Y, Tina arde el silencio autónomo en solventar una idea en querer volar lejos de allí y en querer atrapar el deseo en proseguir un rumbo incierto cuando arde el calor o el frío y trata de volar lejos quedando la forma en subir hacia el cielo, tomar aire y tratar de volar como una chiringa o una cometa, pero, con un hilo que afortunadamente está adherido a una mano. Y Tina se aferró al deseo incierto o al frío cuando no pudo nunca volar lejos, si ella no lo aprendió jamás hasta que logra sublevar una sola razón. El mar, el vuelo, el aire, el viento, el puerto seguro o la vida o la esencia y la forma de volar lejos y tener alas, aunque sea ser humano, si tienes el deseo de volar lo tendrás ¿por qué no?, y Tina se aterra, se asusta y es muy indeleble el trágico instante en que la ayuda por querer tratar de volar se aferra a lo lejos en querer subir hasta el cielo. Y sus manos como alas entre sus hombros no le dan abasto para echar a volar, pero, en el instante en que Tina abre alas y echa a volar cae desde la cama en su propio dormitorio. Tina, sólo quiere volar lejos de allí y no puede aún, o es que no lo aprende a abrir alas y echar a volar como un lindo y pequeño polluelo de un nido. Cuando, Tina en el alma, en la mar y en el recreo de la verdad quedó sin alas que echar a volar cuando ocurre lo que discurre un tiempo sin tiempo, y un ocaso sin ocaso y llega la noche en su habitación a perder las alas que quiso sublevar por tanto y por demasiada irremediable razón. Tina se ve en la encrucijada en querer solventar a la razón de tiempo y de una salida incierta casi en el tiempo y casi entre las horas muertas de una sola salida, por la cual, se aferra el deseo de volar lejos y echar alas para tratar de volar lejos. Tina en su oscura habitación de noche y se cuece el sol curtido de mayo por el desastre en creer en el imperio de unos ojos que miran directamente hacia el mismo cielo cuando, ocurre lo que transcurre echar volar lejos con alas y tratar de volar por los mares abiertos, llegando a un puerto seguro, y proseguir con el rumbo y la dirección hacia proseguir un camino cierto hasta poder llegar hacia la única verdad inocua cuando arden los celos de amar a esas alas de cartón, por las cuales, como un Ícaro descubrió e inventó y trató de volar. Tina sola en su habitación lee la historia de un tal Ícaro y le agradó mucho la idea, pero, aunque esa no era su idea trató de echar a volar lejos de allí. La muchacha de cabellos marrón y de ojos color café, sólo quiso ser como el deseo o como el ambigüo camino y sin cogitar mucho, sino que siente y presiente subir, abrir alas y echar a volar lejos de allí, pero, ¿cómo hacerlo?, sino podía intentar ni tratar a volar si la habitación era estrecha y muy pequeña. La vida de Tina quedó en maltrecho continuo y tan ambigüo como el camino frío, desértico y muy errático cuando se logra vivir a ciencia incierta y ser como un cometa o como una chiringa aunque el hilo sea amarrado a una mano sin una buena libertad. 

Las alas de Tina están rotas, dice ella. Si para Tina, solamente las alas son la única forma de adquirir un vuelo e ir trás de la verdad inocua, pero, trascendental de una forma adquiriendo y adhiriendo a sus espaldas dos alas con las que podría volar lejos, sola y más que eso atrapar la inspiración, la musa, y la percepción cuando en el alma trata de volar lejos como el cielo mismo. El cielo quedó inalcanzable como un recelo de esos en que la verdad queda tonta y lerda como Tina es lerda y tonta. Las tonterías que expresa Tina la van llevando hacia lo intransigente, hacia lo inevitable, hacia un rumbo inexplicable, y hacia una dirección sin discreción y sin disidencias solapando un raciocinio intelegible, inteligente y muy bueno. Tina, en el alma de creer en el combate de dar una sola salida, siente que sus alas están rotas de tanto volar haciendo que la chiringa o la cometa vuele lejos sin un hilo atrapado entre las manos. Cuando en el momento de entretejer una telaraña la araña la teje llena de seda, y Tina recorre esa habitación, pero, no, no queda atrapada sino que sus alas van a volar algún día cuando la niña lo aprenda por completo. Y como un pasaje de ida y sin regresos, la niña Tina siendo la joven más lerda, sólo presiente volar y tratar de echar el ancla del barco y detener el barco sin zarpar otra vez, pero, ¿para qué detener un barco con un ancla?, si se puede navegar por los mares abiertos de la soledad, de la libertad y más de la amarga y terrible y más cruel de las vidas sólo para tratar de olvidar los malos recuerdos. Tina expresa, que sus alas no son para volar si no puede con ellas volar lejos, sino que queda adherida al maldito suelo. Así que las alas de Tina están rotas, ajadas, y muy débiles, pero, en el trance de la verdad que el silencio en la habitación de Tina es por ella pensar cómo tratar de volar lejos de allí, de ese tormento, de esa casa sin amor, de ese colegio sin sensibilidad por un grupo de estudiantes que realiza ¨bullying¨ a los estudiantes lerdos, novatos y de prepa. Mientras que, Tina trata de volar, hace de sus sueños unos tan reales como la posible posibilidad en hacer verdad a esos sueños y queda dormida entre alas rotas y entre tratar de volar lejos de allí. Cuando, Tina en el alma se siente como una niña insolvente, pero, muy insípida, muy lerda y queriendo atrapar alas dentro de su propia habitación conlleva una dulce atracción, pero, queda Tina muy agradecida por la vida, por las alas que posee, y por el tiempo en que, sólo ella piensa como echar a volar. Y esas alas rotas, y dijo Tina que… -¨las arreglaré, las atraparé, y las echaré a volar¨-. -¨Vas a ver Dios que podré con todo¨-, le dice Tina como siendo la niña más lerda de todos los tiempos. Y conlleva una de las sonrisas más bellas de todos los siglos y de todos los tiempos, pero, la jovencita es lerda y todos en el colegio se burlan de ella. Las alas rotas de Tina, como ella dice y presiente que son así, que están rotas y todo porque no puede tratar de volar lejos cuando en la alborada se despierta y, aún pertenece allí a esa fría habitación y a ese hogar donde no hay amor. La vida comienza desde el punto de partida cuando, la niña Tina es burlada por la falda colegial que se enredó por el camino en un arbusto y se deshiló la falda de Tina, logrando ser burla de un grupo de estudiantes que realizan ¨bullying¨ a los estudiantes lerdos logrando y haciendo llorar con lágrimas de dolor el capricho de la fuerza de unos sobre otros. Tina va de rumbo incierto desde su habitación, si hoy es sábado, trata de volar y echar a volar la vida, la suerte y la verdad impoluta e inocua en hacer volar su vida con alas de cartón y no de acero como las de un Ícaro. Y la niña Tina de cabellos marrón y ojos de color café, sólo se aferra al frío y al gélido viento cuando por la ventana llega el viento y con él, la única salida para poder intentar volar lejos de allí.

Tina sabe una de dos cosas, que el que tiene alas sabe cómo volar y el que no puede volar tiene alas rotas, pero, ¿cómo es posible que pueda ocurrir algo así?, si la mentira se descubre y la verdad se constata con la certeza. Cuando, en Tina arde como el tormento abierto e incierto como la posible posibilidad de creer en el alma muerta de un espanto seguro como el tormento friolero cuando sus alas yacen rotas. Cuando, arde el reloj de un tiempo perdido, en el alma de Tina recorre toda la habitación por saber que sus alas tienen viento y que puede volar lejos, pero, no, no están mojadas ni rotas, sólo las tiene y las posee como adorno ornamental para poder salir del trance directo de un acecho de ¨bullying¨, sólo desea Tina demostrar que puede ser una chica de cabellos marrón y de ojos color café muy lista y que nadie se burle de ella en el colegio como estudiante. Y Tina descubrió una sola cosa: el que tiene alas sabe cómo volar y el que no puede volar tiene alas rotas, y las de ella, sólo eran alas solapando sobre la sabiduría de un sólo cartón hecho a la medida para Tina. Y, sí, que lo descubrió todo cuando en su alma sintió una fuerza extrasensorial como que la quería elevar para que ella pudiera volar lejos, pero, todo quedó hasta ahí y no lo volvió a recordar la niña Tina. Tina pudo solapar en su interior y en su sabiduría hace del raciocinio una cuestión de intelegible palabra para entender que las alas de Tina no tenían que ser de cartón, aunque Tina las confundió, ella, sólo quería echar a volar con sus propias alas, por propio mérito, y con propio esfuerzo dejando atrás al grupo de estudiantes que realizan ¨bullying¨ en el colegio donde Tina estudia. Tina se da cuenta que para poder volar no se necesitan alas porque el ser humano no puede ni tiene alas para volar, aunque es un animal no es un ave con alas para poder echar a volar. Tina era la niña secreta del mar abierto y del cielo inalcanzable, también que dentro de la posibilidad de creer que sus alas son de cartón, Tina sólo quiere sentir volar y echar alas para volar inteligiblemente. Y Tina pudo saber algo muy indecoroso, que el que tiene alas sabe cómo volar y el que no puede volar tiene alas rotas, y ella era una de esas personas porque, aunque ella lo intentó no ha ni ha podido volar ni echar a volar con alas de cartón o con alas de acero como un Ícaro. Tina pudo descubrir la razón verdadera de decir que las alas son para volar, y no para quedarse estancado y sin hacer nada en la vida. Tina, sólo quiere una cosa y tan real como hacer echar volar a sus propias alas. Las personas para Tina son como el desenlace fatal si poseen alas inquebrantables o alas rotas cuando desean realizar éxitos o fracasos, para Tina era muy importante tratar de volar lejos e ir en lejanía hacia sus propios deseos y convertir sus anhelos en saber que el destino es indecoroso como el tiempo y como el instante que se cuece el alma en saber que las alas rotas se enfrascan en un cometido frío y en un delirio trascendental. Si dentro del alma de Tina no se detiene el alma en convertir que pueda volar lejos con o sin alas, pero, ¿para qué existen las alas?, sí, las alas que nos dejan alzar el vuelo, para alcanzar nuestros deseos, anhelos y si son éxitos mejor y si son fracasos, pues, aprendemos más de lo que habíamos aprendido. Si Tina va de rumbo y en una buena dirección para ser una jovencita con alas y poder volar lejos, sí, lejos de su origen, de su cuna, lejos e ir más allá de la libre libertad. La vida empieza como se comienza a vivir cuando en el alma de Tina se aferra al trance perfecto de vivir sin fracasos y sin errores como aquella vez en que el instante se siente como una verdad efímera, pero, trascendental. La vida de Tina cree que las personas sin alas no pueden volar y realizar sus sueños, anhelos, y más que eso, éxitos y todo porque tienen o poseen alas rotas. 

Tina es de las personas que poseen las alas rotas y para Tina, sólo cree que en el tiempo es lejanía como el cielo inalcanzable, pero, Tina, sólo arregla a sus alas rotas para poder volar lejos desde su propio origen o cuna hacia el mismo instante en que se cuece la propia alma. Tina quiere y desea que el instinto se aferre hacia el mismo carril en una sola dirección cuando ocurre lo que transcurre un sólo mal tiempo para comenzar a arreglar las alas rotas de Tina. Si Tina posee alas rotas porque toda su vida ha sido un fracaso sin un acierto indebido cuando discurre lo que empieza cuando en el alma no hay luz ni percepción alguna, pero, en el alma una sola insistencia fría y tan cierta como el ademán frío de una sola verdad cuando las alas rotas de Tina no tienen arreglo, pues, son hechas de cartón y el cartón no sobrevivió por tanto lanzarse desde su dormitorio hacia el cielo inalcanzable para poder volar lejos de allí. Tina va lejos y en la lejana situación a arreglar sus propias alas rotas. Porque, de repente, Tina ve y nota sus alas rotas para continuar demostrando que todo se puede y que las niñas lerdas también pueden aprender a volar y soltar sus propios instintos y con alas rotas no se puede lograr nada. La vida para Tina fue crear alas sostenibles, sustentables, y muy fuertes. La vida para Tina es creer que para poder volar se necesitan alas, si ella trata y las arregla como cualquier mecánico o cualquier doctor que desea el bienestar de los pacientes con un sólo tratamiento. Tina en el trance de la impoluta verdad se aferra a arreglar de todos los modos a sus propias alas rotas hechas de cartón. La niña Tina toma una pega o cinta adhesiva y luce con las alas rotas. Tina, sólo desea que sus alas pueden volar lejos y que el deseo de ver a sus alas perfectas y en muy bien estado, si el cartón está arreglado y muy bien. Tina toma a sus alas entre sus manos y ya no desea más volar, si se cae cada vez que desea volar entre su cama y cae sobrevolando desde su dormitorio. Tina va de rumbo sin dirección alguna a hacer realidad sus sueños, si en el alma y más en su cuerpo se obtiene una sola verdad inocua en saber que el destino se aferra en sentir que Tina llora por no poder volar en esa oscura habitación, de ese hogar sin amor y del grupo de estudiantes que realizan ¨bullying¨, si la vida es el comienzo para Tina. Y comienza desde cero, otra vez, Tina trata y vuela lejos, pero, no lo logra aún, ni todavía corre la buena suerte en creer que su cuerpo puede volar lejos. Cuando, Tina en el alma corre ser como el deseo efímero o como el instinto en que se fue el alma de un sólo susto o de una crisis cuando cae de frente en su habitación y hasta pierde la noción, el pensamiento, hasta los sentimientos y las ganas en querer volver a caer de frente por tratar volar con sus alas de cartón como la alas de acero de Ícaro. Tina vuelve a intensificar su virtud y su insistente valor en crear en el alma una sola señal, es caer y tratar de volar aún, la comitiva en querer volar sobre el dormitorio, pero, jamás caer, otra vez, de frente. Y Tina se siente como el nefasto más cruel de todos los tiempos y fue caer sobre su propio dormitorio hasta caer dormitando en su habitación. Tina no sabe nada del mundo, es sólo una niña lerda de cabellos marrón, de ojos color café y es una estudiante del colegio aledaño a su hogar, hogar que no tiene amor ni desenlace fatal. Cuando, en el alma de Tina, se aferra a sentir lo que ocurre en su habitación y es como el tormento eficaz por tratar de volar hacia el más débil de los momentos cuando en el alma de Tina se siente como el suave tormento eficaz de caer sobre el dormitorio. Cuando, Tina se siente como la más indeleble situación hacia el cielo, siempre al cielo inalcanzable en querer alcanzar sus ideales, sus metas, más sus anhelos y sus deseos. Tina, en la habitación, cayó de frente y perdió toda noción y toda percepción.  

Tina cayó rendida de tanto tratar de volar lejos desde su dormitorio sin saber cómo es que realmente es volar lejos. Y Tina está inconsciente en su habitación, en el suelo y no en el cielo como había querido y tratado de volar. La vida de Tina se siente como el dolor, como la frustración, como el fracaso, y como el más nefasto de todos los tiempos. Si Tina queda como el silencio autónomo en creer en el arte de haber creado unas alas de cartón para poder volar lejos, pero, esas alas se hallan rotas como el sentido y como los sentimientos fríos y tan frioleros como el trance en quedar semidormida sobre el suelo. Y en contra de la voluntad se aferra como se aterra en sentir un sueño en lo divago de la mente a cuestas de la sola voluntad. Cuando, Tina en el tormento de cada quién y su familia en ese hogar donde no existe ni hay amor sino la halla jamás dormida o inconsciente en la misma vida y más en su propia habitación. La vida de Tina se aferra al deseo y a la verdad incongruente en querer solventar la verdad fría en querer arribar hacia el cielo inalcanzable en ser como el cometa o chiringa donde el hilo queda adherido a una sola mano. La vida queda inconsciente para Tina tirada allí en el suelo y tan dormida como si fuera un sueño indeleble. Tina tiene un sueño y la hace sentir mejor que nadie, cuando en el embate de creer en cómo tratar de volar la hace más eficaz en vez de una sola pesadilla. Tina en el torrente de sensaciones inocuas, se atemoriza de espanto nocturno cuando tiene un sueño, le hace reflexionar y cogitar la espera de sentirse como toda heroína de sus propios sueños y el sueño le enseñó cómo volar lejos de allí y que su vida comience a cambiar y a tomar otro giro inesperado. La vida de Tina se torna exasperada como el torrente de sensaciones buenas como si fuera una gran pesadilla, pero, es sólo un sueño. Cuando, en el alma de Tina empieza a caer sobre el mismo silencio e inconsciente se torna exasperada cuando ocurre lo que discurre una sola señal y es en la forma que en el sueño se revela cómo es volar lejos sin alas rotas. Y Tina se enfrasca en el tormento y en el delirio frío en caer sobre el sueño y no sobre la pesadilla. Tina ya sabe cómo intentar volar lejos y tratar de alcanzar el cielo inalcanzable por tanto decreto y secreto de un sueño indeleble que sólo le deja sentir lo que quiere. Y para Tina, el sueño eficaz es como el mismo tormento o como el mismo instante que el cielo se abrió lleno de deseos, anhelos e ilusiones la mente dormida de la muchacha de cabellos marrón y ojos de color café. Tina en el sueño revelador sólo le explica a Tina cómo realizar y alzar el vuelo sin alas rotas hacia el cielo donde ella cree que está la perfección y en poder ser más lista que lerda. La muchacha llamada Tina queda dormida, rendida, caída y con un sueño mortal frente a su cama en el dormitorio y en el sueño de Tina la hace vencedora, luchadora por poder realizar su sueño y volar sin alas rotas con alas de cartón sin tentar a las alas de acero de Ícaro. La vida de Tina comienza a discernir con disidencias autónomas reflexionando al cogitar un altercado o una camorra hacia la misma inmensidad en querer y tratar de volar lejos, pero, sin alas rotas. Tina se aferra al sueño dormitando y en un letargo sin ser pesadilla, la niña, ya sabe cómo poder volar lejos con alas de cartón y sin estar rotas. La vida para Tina se acerca en discernir entre volar en el dormitorio o volar con su propia imaginación y Tina lo aprendió que no se puede volar si somos sólo seres humanos y no aves de rapaz con alas fuertes sino que tenemos alas imaginarias, invisibles, abstractas y en un sólo momento abrir alas y alzar el vuelo, pero, con la imaginación puesta en el mismo cielo inalcanzable con anhelos, con ilusiones y con insistente perfecto corazón porque, si Tina desea lo que quiere todo lo puede alcanzar. 

Tina sabe una cosa que es ella o son sus alas rotas si ya sabe cómo poder volar lejos y sin apenas abrir alas y solapar en pensamiento hacia la misma eternidad y firmamento queriendo llegar a la cima o a la cúpula de un cielo inalcanzable. Tina logra alcanzar los sueños más indelebles cuando despierta de ese letargo inconsciente que la dejó atónita y estupefacta sobre el suelo en el dormitorio y ya puede volar imaginativamente y fraguando sus más grandes anhelos para poder ser realizables. La vida de Tina se aferra al frío desconcierto al no saber abrir alas y alzar el vuelo hasta que el sueño le pudo revelar cómo volar lejos de allí y de ese hogar donde no hay amor. Tina sabe una cosa que es ella o son sus alas rotas porque si vuela lejos pude que sus alas estén rotas y se imagina que la vida es como irrumpir un sueño en una sola pesadilla. Tina se atreve a desafiar a sus propias alas rotas cuando en el alma ve una luz y observa que ya puede volar lejos de allí, pero, en el sueño, sólo quiso ser como aquella falda colegial remendada y quiso tomar aquél arbusto que deshiló a su falda colegial dejando en vergüenza una actitud parca, dejando lerda la vida y más a un corazón lucío en el colegio. Aquél grupo de estudiantes realizando ¨bullying¨ ya no se hallan en el colegio cuando Tina, la muchacha de cabellos marrón, ojos de color café y lerda solamente desafió al mundo y perpetró la vida tratando de volar y alzar el vuelo mágicamente, imaginativamente y abstractamente, si solo Tina sabía algo y entre dos cosas alzar el vuelo o quedar con alas rotas y si volaba y sus alas quiebran sabía cómo tratar de alzar el vuelo nuevamente. La vida para Tina se enaltece con una furia o euforia clandestina de obtener que sus sueños se hagan realidad para cumplir los deseos más ambigüos, pero, tan claros como el espejo o el cristal. Tina logra enredar la vida en un tiempo en que solventa la vida como poder servir lo que acontece como el olvido de aquellas alas rotas cuando intentó tratar de volar en su dormitorio para poder volar lejos de allí. La niña Tina abrió imaginación, pensamiento y pudo lograr lo que nunca volar con su propia imaginación, ya nada ni nadie la detiene si, supo cómo alcanzar al cielo, a la razón, al pensamiento, a los sentimientos y más que todo a sus propios sueños. Tina sucumbe y zozobra con alas rotas cuando logró subir al cielo y sin caer jamás en la terrible tentación ni lograr sus propios sueños. Tina sabe que las alas quiebran como quebranta el alma, los pensamientos y hasta los sentimientos cuando no se logra volar tan lejos como logró volar en su propia mente e imaginación Tina. La jovenzuela quedó llena de temor, llena de ansiedad, llena de un horror casi clandestino en poder solventar que su propia imaginación vuela tan lejos como sus propios pensamientos, voló y voló, se la llevó el viento hasta que sus alas abren brecha y pudo volar lejos de allí, de aquella habitación, de aquel colegio y de aquellos estudiantes haciendo ¨bullying¨. El valor de Tina aumentó y superó las lindas expectativas por lograr sus propios sueños, anhelos y las ilusiones quedan a la deriva como aquel barco, en el cual, nunca ancló y sin quedar varada sucumbió muy adentro en altamar buscando a aquel tesoro mágico en tratar de volar hacia un buen destino y el camino irrumpió en un recelo de vida cuando Tina abrió alas y alzó el vuelo dejando estéril a los sueños irrealizables. La vida de Tina esperó y calló en silencio todo aquello que era poder con alas volar y obtener de sus sueños la pura verdad. El sol en el cielo alumbró el camino de Tina queriendo construir un buen camino y un buen destino cuando alzar el vuelo fue querer soñar y volar lejos para poder hasta el sol tocar y palpar con las manos, con los sueños y con las ilusiones realizables. 

Tina en el dormitorio trató de volar después de pensar cómo tratar de volar y ya sabía cómo lograrlo. La vida de Tina sucumbe en un delirio casi trascendental, intransigente e insípido cuando en el ocaso se pierde en el ademán frío en converger con disidencias al deliberar cómo poder tratar de volar sin alas rotas ni quebradas. A Tina, algo la detiene, no es su propia mente ni sus propios pensamientos ni sus sentimientos, fue simple y sencillamente su propia imaginación que hizo un detenimiento al pensar qué quería realizar. Los sueños de Tina comenzaron desde que aquel arbusto deshiló a su falda colegial y pasó una vergüenza entre amigos del colegio y por aquellos estudiantes que le realizan ¨bullying¨, sólo quiso ser como un ángel con alas bonitas hasta poder volar al cielo mismo y poder alcanzar lo inalcanzable de una vida lerda, tonta, estúpida y ser la chica ideal, lista, astuta y muy despierta para poder sentir que pertenece al mundo de los vivos. La esencia de Tina marca una trascendencia, una intransigencia y hasta un ambigüo proceder de pensar que el instinto de Tina subleva una atracción fría, pero, muy indeleble por realizar sus más anhelados sueños y era poder demostrar al mundo que ser lerda, tonta y estúpida no era lo suficiente para cambiar de estilo de vida y ser la chica popular sin vergüenza alguna en el colegio. Tina, sólo desea ser una chica popular, realizar sueños, abrir alas y alzar el vuelo hacia lo más imaginario, pero, contundente en realizar sus propios anhelos. La vida de Tina calma en silencio, calla e inmuta en un silencio sabio en aquel dormitorio donde la vida emerge y emana sin poder ver realizados sus sueños, pero, algo detuvo a Tina en realizar sus más anhelados sueños y fue su madre que llega ininterrumpidamente a la habitación de Tina. La madre expresa a Tina que hará cambiar el rumbo del hogar hacia un hogar lleno de amor, paz y que será distinto convivir en ese hogar. Los sueños y anhelos de Tina se logran realizar, pues, Tina no era feliz en ese hogar ni en el colegio. Tina sabe una cosa que sus deseos son irreprochables y que, sólo anhela abrir mente, pensamiento, sentimiento y lo más grande el corazón para poder abrir alas y alzar el vuelo. Tina quiere una cosa, si ya sabe volar lejos con su propia imaginación y es amar el alma con la luz de un venidero instante cuando se cuece el alma de bondad, plenitud, paz y sin tormento ni tempestad abrir alas y alzar el vuelo. Tina espera por el tiempo sosegado, templado, irreal y muy trascendental para poder asistir al colegio y, otra vez, ver al chico que la acompaña sin vergüenza de haber perdido su falda colegial deshilada con el arbusto. Y aquel grupo de estudiantes que hacen ¨bullying¨, sólo quería otorgar lo merecido abrir alas y tratar de volar con inteligencia, ser lista y ser más astuta para poder liberar el tormento de un renacer hacia realizar sus propios sueños. Tina la detiene algo, pero, ella ya lo conoce y es su propio pensamiento y su solo sentimiento cuando logra superar y realizar sus más anhelados sueños. Cuando, Tina en el tiempo y en el solo destino se siente como el solo capricho desnudo en poder realizar lo acometido en poder abrir alas y alzar el vuelo. Y Tina lo sabe que el destino lo siente y lo presiente que en el deseo y en lo más ambigüo de un todo, sólo pudo ser como el destino y sin poder haber realizado un sueño. La vida de Tina sucumbe en el tiempo y más en el embate de creer en el alma ciega y sin sospechar que el destino se crea como se hace y se nace como se crean los sueños más indecorosos de todos los malos tiempos. Cuando, Tina arde el deseo y más la espera en solapar la comitiva de creer en abrir alas y alzar el vuelo. La vida de Tina se siente como se hace y se realiza como se nace un tiempo y una sola verdad ajena, pero, muy trascendental. 

Tina llega al colegio el lunes, renace su esencia, su presencia cuando arde el deseo y el alma en cada sospecha en querer ser como el deseo, queriendo abrir alas y alzar el vuelo. Tina se siente como el cielo realizable y como el alma abierta a los sueños para poder realizar sus más indelebles deseos. La vida comienza en abrir sueños y deseos e ilusiones como el mismo anhelo en solventar la carencia de una vergüenza que, sólo ella sintió cuando se deshiló la falda colegial frente a ese chico ideal que a ella le sorprende en el corazón. Tina logra llegar al colegio y sustenta lo que queda en el alma, es abrir alas, sueños realizables y alzar el vuelo lejos de allí hasta poder ver y sentir en el alma la espera exasperada de ver que los sueños son inquebrantablemente inocuos. Y las alas rotas de Tina ya no se ven jamás y la situación lerda de Tina se ve como astuta y sin temor alguno salta en su corazón un sólo latido para poder enaltecer de la vida y esperar a que el destino brille como el silencio o como poder abrir alas y alzar el vuelo sin ser alas rotas ni inquebrantables. Tina llegó al colegio con falda nueva y nuevos sueños, anhelos, y con una imaginación con más de 100% IQ´S, levantando los ojos y la mirada altiva y sin más vergüenza quiso aquello que se llaman sueños realizables y supo cómo abrir alas y alzar el vuelo. Y el chico ideal la miró, pero, ella supo cómo lidiar con la situación y con nueva falda colegial y con astucia quiso aquel sueño que fuera real con el chico ideal y, sí que lo imaginó tanto que abrió alas, alzó el vuelo y nada ni nadie la pudo detener, sin alas rotas amó a ése chico.  

FIN