No digas que fue un sueño aislado,
fuiste tú, bella endemoniada,
al despertar de madrugada
quien me tuviste adormecido,
con tus pócimas de beleño,
con mis ojos aún sellados.
Te abrigaste en mi pecho cálido,
con claras ansias renacidas,
burlando mi mente menguada
con tu conjuro proferido,
para tu arlequín de ensueño,
para el gozo de tus pecados.
Tu mirada de verdes plácidos
gemía labias repetidas,
anhelando sentirte amada.
En tu boca, un beso perdido
te despertó del breve engaño
de tus rocíos pervertidos.
- Autor: Salva Carrion ( Offline)
- Publicado: 22 de agosto de 2024 a las 06:25
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, EmilianoDR, Antonio Pais, Mauro Enrique Lopez Z., Antonio BALGAL✈
Comentarios3
Un hermoso poema de amor que en todo se brinda a ser comentado con ese placer de quien estos versos ha leído con un interés desmesurado
Un saludo
Gracias por comentar.
Saludos cordiales.
Un saludo
Salva, amor encendido en esta madrugada.
Saludos y gracias.
EmilianoDR, hola.
El amor cuando no está encendido, es una brasa que quema...
Saludos cordiales.
Me encantó lo de “bella endemoniada” 😂😂
También merecen un Genial!! Tus letras.
Hey
A mi también. En algunos de mis intentos de poemas, permito que emerja mi ironía.
Saludos cordiales
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