Mutilaron los muros del sosiego
con cuentos de figuras trasnochadas,
regresaron los gritos de la noche
y huellas del sollozo en la almohada.
Con los puños cerrados de impotencia,
el dolor oprimiendo las palabras
y la lengua lacerada de silencio,
deambuló con la sangre envenenada.
Con coronas de púas marchitaron
la buena sintonía y la concordia
de una vida, trizando los espejos.
Salpicada del fango de las hienas
un alma vagará con la aflicción
de su dogma rodando por los suelos.
- Autor: Rosario Bersabé (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de agosto de 2024 a las 06:42
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 165
- Usuarios favoritos de este poema: Tommy Duque, Lualpri, jvnavarro, Antonio Pais, EmilianoDR, Scarlett-Oru, Morpheo, Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna, Classman, Gonci, Gonzalo Márquez Pedregal, CARLOS ARMIJO R...✒️, El Hombre de la Rosa, Javier Julián Enríquez
Comentarios3
Un poema con mucha fuerza
Un saludo
Muchas Gracias.
Salpicada del fango de las hienas
un alma vagará con la aflicción
de su dogma rodando por los suelos.
Que tristes imagenes evocan estos versos.
Saludos poeta.
Muchas gracias, Emiliano.
Fue interesante entrar a tu espacio, fue, muy bueno, leerte, un abrazo.
Muchas gracias por venir. Abrazos.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.