Es un arte

Siempre creí que para esa persona era especial, siempre creemos que para esa persona somos especiales, hasta que nos demuestran lo contrario. Hay veces que viven del pasado, ignorando el presente, destruyendo el futuro. Es duro.

Nos hacen ver con detalles y actitudes que solo éramos como todos, como otros o como los demás, ¡¡igual!!, un simple mortal. Me creía importante, nos creíamos importantes, luego tropezamos, caemos, nos pegamos un golpe duro en la cabeza, hasta que despertamos.

Descubrimos que, a pesar del tiempo, ni siquiera llegamos a ser tan interesantes. Cuantos de nosotros esperábamos un gran alago, un buen elogio, pero como nunca llegó, nunca ocurrió, nos sentamos a pensar, a reflexionar si fue justo, si fue correcto habernos tomado esa decisión.

La decisión de quedarnos con alguien que nos demuestra indiferencia a pesar de considerarla nuestra pareja, entendemos y comprendemos que el amor casi nunca es mutuo; a veces unas pocas caricias, unos pocos besos, para nuestra triste alma y pobre dolor ya es mucho.

Es suficiente; nuestras vidas convalecientes con pocas cosas sobreviven y lo peor es que somos consientes; hay días que acepto las mentiras, hay días que aceptamos las mentiras, y no tenemos de otra. ¿Cómo saber la verdad?, no hay forma.

Todo se torna oscuro como una fosa, dura como una roca; da vueltas y vueltas, como una rosca, que gira y gira hasta llegar a su tope. Soy adicto al dolor, somos adictos al dolor, somos torpes.

Mi estilo de vivir, nuestro estilo de vivir es un arte; se ensañan con mi amor, se ensañan con nuestro amor, pero seguimos adelante, queriendo ser importante para esa persona con quien elegí vivir, con esa persona con quien elegimos vivir. Mendigar amor es bastante humillante.

No puedo pedir lo que no siente por mí, no podemos pedir lo que no sienten por nosotros; es irónicamente tortuoso; en ello no hay gozo, hundidos en el pozo, de la frustración.

Tú y yo sabemos, nosotros sabemos, todos, los que no somos correspondidos, que luchar por un amor cansa, y a la vez es bastante vergonzoso.

Y aunque vivamos esperando que se nos amen, seguiremos tomando esos sorbos amargos, envenenándonos de dolor hasta que nuestras vidas poco a poco se apaguen.

Lo mío, lo de nosotros, que sufrimos por amor y tratamos de estar mejor,

"Es un arte".