Hoy me arranqué el corazón.
Lo dejé sobre la mesa de un restaurante en Edimburgo.
La única testigo, una desconocida.
Mis ojos buscaban la compasión de los suyos.
¡Dime algo mujer desconocida!
Aunque sea una burla, te lo suplico.
Concédeme un gesto, aunque sea de vergüenza,
ayúdame a sentir que todavía existo.
- Autor: Akudama (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de septiembre de 2024 a las 05:51
- Comentario del autor sobre el poema: A veces hay momentos que nos marcan. Cosas que parecen intrascendentes, pero se graban en la memoria. Nunca olvidaré este momento.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais, Scarlett-Oru, EmilianoDR, Mauro Enrique Lopez Z., racsonando, Gonzalo Márquez Pedregal, alicia perez hernandez
Comentarios1
Amigo recoja su corazón para sentirse y estar vivo.
Encantado de leerle amigo.
Saludos.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.