El desierto (II). Los Girasoles

Carolina Montero Mendoza

                                                       
Escuché que en el desierto
pueden crecen girasoles 
En éste en el que habito
quizás también crecían 
Pero ha llegado un sol
Oscuro, pérfido y maligno 
Y se ha llevado la fé
De lo que aún vivía. 

Un sol abrasador
que arrasó con el anhelo 
Un fuego de exterminio
que todo lo elimina 
Girasoles en llamas
son lo único que veo
Símbolo de lo poco
que aún sentía que latía.

Lo que solían ser 
Ahora no lo son más 
Ya no representan ni luz
ni esperanza, ni belleza
Son solo el recordatorio 
de que todo son cenizas 
Yaciendo inertes y erguidas 
aquellas flores extintas. 

En los desiertos
no crecen los girasoles 
Tan solo son artilugios
de una ilusión vacía. 

Aquí únicamente quedan 
Simples ecos del pasado
De tiempos primaverales
Que ahora inunda la sequía. 

 

 

 

 

 

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Comentarios3

  • Salva Carrion

    Saludos de un pingüino pelirrojo en el desierto del Sáhara…

    • Carolina Montero Mendoza

      Hablando de metáforas complejas... 😅
      Saludos para ti también.

      • Salva Carrion

        Carolina, hola.
        Jajaja.
        Hablando de metáforas, publiqué un poema titulado “Aquí estoy más solo que un pingüino pelirrojo en el desierto del Sáhara”.
        Donde con humor use varias metáforas.
        Saludos con sano humor.

        • Carolina Montero Mendoza

          Pasaré por tu perfil para leerlo 😉
          El humor es importante para la vida, y si viene en forma de poema, mucho mejor.
          Gracias por leerme, y también te envío otro saludo, ya en serio, desde la ya no tan fría Bogotá 😁

          • Salva Carrion

            Como marino que fui, arribé a varios puertos colombianos. Calor infernal. Los pájaros caían fritos del cielo. Literal.
            Me gustan tus poemas y metáforas.
            Saludos, amiga poeta.

          • Raül Bernadas

            He llegado a pensar que ningún poema es escrito por uno mismo. Es telepatía, es un dictado, es un mandato del alma que se transcribe en metáforas poéticas. Tristísimo y bello

            • Carolina Montero Mendoza

              Así es, Raül. Desde el primer poema que escribí he creído que es "alguien más" que nos está susurrando al oído palabra por palabra. A lo mejor es en realidad lo que tú describes tan bellamente: Un mandato del alma.
              Muchas gracias por leerme y por tu comentario.

            • jvnavarro

              Tienes toda la razón del mundo, Carolina, los desiertos eran en la antigüedad tardía hermosos vergeles llenos de otro tipo de vida a la actual, algunos de los restos más antiguos de seres humanos se han encontrado por esas latitudes. Ejemplo de ello una falange del dedo de un Homo sapiens encontrada en el desierto de Nefud. Ahora mismo los girasoles ya solo crecen en las zonas semidesérticas de la España del interior .Todo como tu dices es una especie de ilusión óptica, lo que ahora vemos, dentro de unos cientos de años, será imposible de ser visto por los seres humanos de ese instante. Un poema escrito con mucho ingenio
              Un saludo

              • Carolina Montero Mendoza

                Todo nació por un comentario de alguien que mencionó que en algunos desiertos aún pueden hacer crecer girasoles. Yo ya había escrito un poema sobre el desierto como metáfora de la sensación de vacío y desencanto. Una serie de factores, entre ellos mi gusto por los girasoles, hizo que este poema viera la luz.
                Gracias por leerme y por tu comentario.
                Un saludo para ti también.

                • jvnavarro

                  Un saludo Carolina y gracias por comentar



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