La vida bajo la lupa

Llaneza

Entre el azul cielo y la tierra,

la vida corona la cima

con los cinco reinos.

 

El hado, al ser su guía

con el poder supremo,

a las vicisitudes alterna.

 

Su libre albedrío 

al tener razón de ser; 

forma parte de la esencia.


En un punto de inflexión 

de forma súbita e inesperada,

cruza el umbral.

 

Y con su alter ego

actúa con diligencia, 

frente a los desafíos.

 

En el tiempo absoluto 

es ineludible y manifiesto, 

el fin de su existencia.

 

 

 

 

 

 

 

 

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Comentarios +

Comentarios13

  • jvnavarro

    Un poema donde todo se ve bajo esa luz que es propia y que mejor se capta si en ello se convierte el lector en el cristalino de esa lupa que se ofrece como título.
    Un saludo

    • Llaneza

      Me encantó tu comentario

      Un abrazo José.

      • jvnavarro

        Gracias y un saludo Llaneza

      • Lualpri

        Gracias por tus letras, querida amiga Llaneza.
        Ten un maravilloso día 🌸 🙋🏻‍♂️

        • Llaneza

          A ti por comentar. Igual que tengas buen día.

          Un abrazo con cariño Luis.

        • Santiago AlboHerna

          si el hado existe, aún la pregunta persiste, qué alcanza su poder? hasta dónde llega su cincel?

          • Llaneza

            Interesante esas preguntas.
            Cuando se cree en el hado, con su poder rige nuestras vidas
            y con su cincel la moldea a su antojo.

          • EmilianoDR

            Y con su alter ego

            actúa con diligencia,

            frente a los desafíos. Gracias por compartir tu poema un placer leerlo estimada poeta Llaneza . Saludos y éxitos.

            • Llaneza

              Me alegra mucho te gustó.

              Un abrazo con cariño Emiliano.

            • Paco Pena

              Buenas tardes Llaneza: Delicado manifiesto para denunciar la falta de respeto por el futuro del mundo que compartimos, brillantemente redactado alrededor de la clasificación de Robert Whittaker que en 1969 publicó dividiendo la vida celular sobre la tierra en 5 Reinos. Precioso el Poema y acertada su creadora. Enhorabuena 👏👏👏👏👏👏👏👏

              • Llaneza

                Sonrío de satisfacción por tus gratas palabras. ¡Gracias!.

                Un abrazo Paco.

              • David Arthur

                ....El hado, al ser su guía
                con el poder supremo,
                a las vicisitudes alterna.....

                Algo profundo tu poema pero muy bien escrito Llaneza

                Saludos y feliz martes
                David

                • Llaneza

                  Gracias David por tu grato comentario.

                  Un abrazo.

                • alicia perez hernandez

                  Y con su alter ego
                  actúa con diligencia,
                  frente a los desafíos.
                  ....
                  A mi que me esculquen!! soy única! jajajajaj mi bella amiga Llaneza eres genial

                  • Llaneza

                    Jajajaja eso es muy cierto eres única otra como tú imposible.

                    Un abrazote amiga .

                  • Raül Bernadas

                    Brillante

                    • Llaneza

                      Gracias por tu grato parecer.

                    • Patricia Aznar Laffont

                      Tiempo absoluto e indefinible y el punto final de la existencia.
                      La profundidad de tus escritos, gime, mata.
                      Mi Nori, cada vez más profundo, cada vez más verdadero.
                      Mil besitos, mi reina!

                      • Llaneza

                        Tan linda me haces sonreír con esa expresión… gime , mata

                        Un abrazote mi amiga querida.

                      • C. Eduardo Barrios (Ex-Toki)

                        Todas íbamos a ser reinas
                        Gabriela Mistral

                        Todas íbamos a ser reinas,
                        de cuatro reinos sobre el mar:
                        Rosalía con Efigenia
                        y Lucila con Soledad.

                        En el valle de Elqui, ceñido
                        de cien montañas o de más,
                        que como ofrendas o tributos
                        arden en rojo y azafrán,

                        Lo decíamos embriagadas,
                        y lo tuvimos por verdad,
                        que seríamos todas reinas
                        y llegaríamos al mar.

                        Con las trenzas de los siete años,
                        y batas claras de percal,
                        persiguiendo tordos huidos
                        en la sombra del higueral,

                        De los cuatro reinos, decíamos,
                        indudables como el Korán,
                        que por grandes y por cabales
                        alcanzarían hasta el mar.

                        Cuatro esposos desposarían,
                        por el tiempo de desposar,
                        y eran reyes y cantadores
                        como David, rey de Judá.

                        Y de ser grandes nuestros reinos,
                        ellos tendrían, sin faltar,
                        mares verdes, mares de algas,
                        y el ave loca del faisán.

                        Y de tener todos los frutos,
                        árbol de leche, árbol del pan,
                        el guayacán no cortaríamos
                        ni morderíamos metal.

                        Todas íbamos a ser reinas,
                        y de verídico reinar;
                        pero ninguna ha sido reina
                        ni en Arauco ni en Copán.

                        Rosalía besó marino
                        ya desposado en el mar,
                        y al besador, en las Guaitecas,
                        se lo comió la tempestad.

                        Soledad crió siete hermanos
                        y su sangre dejó en su pan,
                        y sus ojos quedaron negros
                        de no haber visto nunca el mar.

                        En las viñas de Montegrande,
                        con su puro seno candeal,
                        mece los hijos de otras reinas
                        y los suyos no mecerá.

                        Efigenia cruzó extranjero
                        en las rutas, y sin hablar,
                        le siguió, sin saberle nombre,
                        porque el hombre parece el mar.

                        Y Lucila, que hablaba a río,
                        a montaña y cañaveral,
                        en las lunas de la locura
                        recibió reino de verdad.

                        En las nubes contó diez hijos
                        y en los salares su reinar,
                        en los ríos ha visto esposos
                        y su manto en la tempestad.

                        Pero en el Valle de Elqui, donde
                        son cien montañas o son más,
                        cantan las otras que vinieron
                        y las que vienen cantarán:

                        ?«En la tierra seremos reinas,
                        y de verídico reinar,
                        y siendo grandes nuestros reinos,
                        llegaremos todas al mar».

                        CARIÑOS Laneza

                        • Llaneza

                          Hermoso versar, me imagino lo publicaras en tu perfil.

                          Un abrazo con cariño Eduardo.

                        • Aqua Marina

                          Al final solos!
                          Nadie puede elegir por ti
                          Nadie tiene ese derecho.
                          Saludos, un gusto leerte.

                          • Llaneza

                            Me gusta tu comentario. Nada ni nadie…

                            Un abrazo.

                          • María C.

                            Una excelente lupa nos muestras.
                            Un abrazo

                            • Llaneza

                              Sonrío me gusta tu comentario.¡Gracias!.

                              Un abrazo con cariño Maria.

                            • JAVIER SOLIS

                              Un amor celestial
                              dno.
                              Desde aquí a la distancia
                              un amor que persiste
                              en el tiempo y el espacio
                              Un amor eterno.
                              Qué bonito mi linda Llaneza, escribes con el alma en la mano.
                              Con mucho cariño
                              JAVIER

                              • Llaneza

                                Me gustó ese versar. .

                                Gracias por tu elogio a mi poema.

                                Un abrazo con cariño Javier.



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