EL TIEMPO VUELA.

EL TIEMPO VUELA

¡Qué rápido pasa el tiempo, y… la vida!

Cuando somos jóvenes tenemos prisa
para ser mayores, deseamos cumplir
años rápidamente, ser adultos cuanto antes.

Hoy, me he parado a pensar en que…
en mis conversaciones con amigos y familiares
suelo irónicamente soltar esta… ya célebre
frase mía: “¡Si es que la semana pasada estaba yo en la mili!”

¡La semana pasada!
Hoy, abril del año 2024, echo cuentas y…
hace ya más de 2760 semanas, de mí
estancia en la mili, más de 19000 días.
¡Y parece que fue ayer!

Y da la casualidad, de que en mi memoria figuran más,
las peores cosas que he vivido, que las mejores.
Aunque, tendría que explicar que…
entre esas peores cosas… muchas de ellas,
comenzaron siendo buenas para mí,
aunque, por desgracia terminaron siendo malas.
¡Bueno! Malas, malas, tampoco fueron, solo…
que acabaron dejando de ser buenas.

¡Y aquí estoy hoy! Mirando pasar el tiempo
por la ventana, y escribiendo para contarle
al mundo, las pocas alegrías, y los muchos
sinsabores conque la vida me ha premiado.

Y… ¿Qué habré hecho yo para merecer esto?
Diría ante un jurado popular si me sometieran a juicio.
y seguro que la respuesta del jurado iba a ser:
-Diga más bien usted, ¿Qué es lo que ha dejado de hacer
para haber obtenido la paga con que la vida le ha premiado?

Y es que, es muy fácil echarle la culpa a la vida,
pues sabido es, que ella, no puede defenderse
de las acusaciones de maltrato que usted le confiere.

Mejor hubiera sido que de vez en cuando, se mirara
usted al espejo para preguntarse a sí mismo…
¿Por qué soy como soy?
¿Por qué no cambio mi forma de actuar?
¿Por qué no cambio el rumbo de mi vida?

Por todo ello, este jurado le condena,
a llevar mientras viva este sentimiento de culpa.
Y, a no poder separarse nunca de él,
ni tan siquiera, si… se le ocurriera acudir
diariamente a la iglesia a oír misa y comulgar.
Así que… amigo, ¡Ajo y agua!