Vaporosa nube descendente hambrienta de colinas,
Envidiosa del rocío y su fragancia,
Muéstrame, otra vez, el hollín del horizonte,
La traición de la balada y la sirena
En este luto de floreciente agua sucia.
Ya no brinda por tí el café de la mañana,
Ni tienes papel en la tragicomedia de las rosas,
Simplemente eres un tren que pasa,
A la misma hora,
A la misma hora.
- Autor: Paris Joel ( Offline)
- Publicado: 13 de octubre de 2024 a las 07:01
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais, Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna, Augusto Fleid, Josué Gutiérrez Jaldin, Soponcio, Sergio Alejandro Cortéz, Lucía Gómez
Comentarios1
Poeta.-
Ay, del día que, ese tren llegue más tarde.
Ay, del día que la espera desespere y no llegue.
Nunca desdeñes lo qué está seguro,
Ello es lo que te puede sacar de apuros.
Saludos poeta. Lindo día.
Si un día el tren no llega siempre nos quedará la nostalgia, es el único consuelo de los vencidos.
Gracias por tu comentario, Raiza.
Abrazo inmenso.
Buenos días.-Paris.
Me encantó tu comentario
Esa es la actitud mágica de los resilientes y es la actitud que, neutraliza con inteligencia, cualquier malestar. Es diferente a la resignación y es más bien operativa, producto de la aceptación reflexiva. Gracias.
Lindo día.
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