En la sombra de un recuerdo,
su prisión es el anhelo,
un suspiro ante el cielo,
por amores que no quedan.
Las memorias se enredan,
y el dolor me acompaña,
en la noche que se baña
de versos y de lamentos,
mi corazón, sin cimientos,
cruje en su amarga cabaña.
La musa que se ausenta,
se escapa entre los rincones,
dejando huecos, prisiones,
y el eco de su voz lenta.
Cada lágrima que se fomenta
es un verso en el papel,
donde el amor fue un pincel
de colores que se han ido,
Hoy el río está partido,
sus aguas lloran su hiel.
Amores perdidos, gritos,
en la bruma se disuelven,
las promesas no se vuelven
más que ecos infinitos.
El corazón, en sus mitos,
anhela lo que se fue,
en la penumbra se ve
su reflejo desvanecido,
un susurro en el olvido,
un deseo en el ayer.
Así canto a la distancia,
a la musa que no vuelve,
en la vida que se pierde
entre sombras de fragancia.
Contra el tiempo, mi elegancia
es un lamento sincero,
escribirlo lo que quiero
mi consuelo y mi condena,
voy con el alma llena,
y en el pecho un agujero.
Rocío
🌹
19/10/2024
- Autor: Rocio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de octubre de 2024 a las 18:33
- CategorÃa: Sin clasificar
- Lecturas: 31
- Usuarios favoritos de este poema: Iago A., Antonio Pais, Marco Gutierrez Jaldin, Tommy Duque, Annabeth Aparicio, ElidethAbreu, Pilar Luna, Augusto Fleid, nachosol, Mauro Jesús (mallito), Gonzalo Márquez, Andrés Romo
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. RegÃstrate aquà o si ya estás registrad@, logueate aquÃ.