VENDAS

Y que espero? es la mil mañana, el mil expreso sin azúcar, amargo gusto a flores como la vida. El cigarro hecho a mano con el tabaco más fuerte que raspa la garganta como el tiempo que dice; no, espera un poco, no, como si siempre eligiera el callejón sin salida 

Y tú ahora me miras incrédula quisieras contentarme un poco, pero pasaste siempre de soslayo mirando con benevolencia a cualquier otro, todos más dignos de ti y les diste lo suyo y mi parte también, ríe, ríe, no eres más que una sombra sin carne.

Ya el tiempo no tiene vendas para mí alma.