Te adoré y amé ciegamente, porque
me dejé engañar por tu sonrisa.
Hoy que comprobé de tu falsía,
cómo me arrepiento y, rezo para que
mi Dios me ayude a sacarte de
mi mente.
Espero que poco a poco
te vayas de mis pensamientos y, así
tener una vida normal, tiernamente
y dormir plácidamente. No tenerte
ni en mi sueño porque, hasta en ellos
lo hago, que me mientes mujer.
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Autor:
CIGARRITO (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 13 de noviembre de 2024 a las 08:10
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais, Lualpri, Tommy Duque, Mauro Enrique Lopez Z., Pilar Luna, Eduardo Rolon, Freddy Kalvo, Josué Gutiérrez Jaldin, JAGC, Patricia Aznar Laffont, Soponcio, Llaneza, Charlie Aritz, JUSTO ALDÚ, Classman, Jaime Correa, Ricardo Castillo., El Hombre de la Rosa
Offline)
Comentarios2
Así será, Maurito.
Patricia que placer tenerte por mis letras sencilla saludo abrazo fraterno bendiciones
Abrazote
Genial pluma estimado Cigarrito
Muchas gracias amigo El hombre de la Rosa por pasar por mis letras saludo abrazo fraterno bendiciones
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