No hay espejos ni dudas. Cuando lo que se tiene que ver no tiene ventanas ni entradas, Solo son agujeros enormes de la transformación, de cambios repentinos que surgen desde el interior. Que abaten un cuerpo colapsado sin remedio ni solución. Que es más que este espacio vacío sin fin. De luces sintéticas e imaginarias incapaces de mostrar su realidad, de rostros que son percibidos diferentes y que no tienen una clara visión de su realidad. ¿Qué son los ojos sino caminos inconscientes de realidades alternas, de visiones fantásticas que nunca son realidad? El vacío de este espacio se expande en la atmósfera. No cabe el cuerpo ni el alma, expandiéndose y contrayéndose. Respira, pero no lo suficiente. Y aunque vive, quizá no esté aquí. Son las manos las señales que dejarán estas notas inservibles, para que descubras mis líos flotando lejos de aquí, sumergidos en el océano y disueltos como el polvo y la arena. Crecer, renacer, revivir. No sé cuántas vidas más o si ya serán más de una. Pero en el fin, solo queda clara una situación, y es que sin importar donde me lleven estos vastos campos, quiero encontrarte. Quiero encontrarte.
- Autor: Majesty BO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de octubre de 2024 a las 14:18
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema es un viaje introspectivo profundo. Las palabras pintan una imagen de transformación interna y lucha existencial.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais, Josué Gutiérrez Jaldin, Mauro Enrique Lopez Z., Sergio Alejandro Cortéz, Ricardo Castillo., El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Mmmm
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