En la hondura de la noche, busco tu luz,
aunque siento que estás cerca, me rodea el silencio.
Mi corazón clama, anhela tu guía,
y en la lucha interna, me siento pequeño.
La religión me enseña a señalar,
a buscar en otros la sombra y el fallo;
mas, ante tu presencia, descubro mi verdad:
mis propias flaquezas, mis propios engaños.
La religión, a veces, se vuelve un velo
que oculta de mí lo que debo mirar;
pero al caminar contigo, Señor,
mi alma desnuda se encuentra en paz.
Aun así, no ceso de buscar tu presencia,
aunque el peso del mundo me invite a caer;
pues sé que en ti hallo paz y descanso,
y en tu amor, la libertad de ser.
- Autor: Jaime Alberto Garzón ( Offline)
- Publicado: 7 de noviembre de 2024 a las 16:26
- Comentario del autor sobre el poema: A través de las sombras de la autocrítica y el silencio interior, el poema refleja el anhelo de hallar paz en la presencia divina y libertad en su amor.
- Categoría: Religioso
- Lecturas: 23
- Usuarios favoritos de este poema: Josué Gutiérrez Jaldin, Eduardo Rolon, ElidethAbreu, Mauro Enrique Lopez Z., WandaAngel, alicia perez hernandez, JAGC, El Hombre de la Rosa
Comentarios2
En la hondura de la noche, busco tu luz, aunque siento que estás cerca, me rodea el silencio.
Mi corazón clama, anhela tu guía, y en la lucha interna, me siento pequeño.
Somos ínfimos.
Saludos
Un abrazo poeta, es cierto, somos ínfimos en el vasto universo, como un susurro en la inmensidad.
interesante poema , siempre buscamos a Dios.
Rafa gracias por pasar por aquí, en Él hallo paz y descanso.
Abrazo poeta.
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