Se le encogió el corazón al escuchar aquel mensaje en el contestador, se derribó toda su vida como un castillo de naipes y comenzó a dar vueltas por la casa, las habitaciones, el aseo… recorrió el pasillo varias veces antes de sentarse en el salón y taparse la cara con las manos. Entonces las lagrimas aparecieron desbordando sus ojos rasgados, brillantes, no pudo contener el llanto que iba en aumento y sus quejidos ahogados en lágrimas parecían que nunca tendrían fin. Su corazón latía con fuerza, tragaba saliva por su garganta en esa desesperada emoción, comenzó a sentir angustia y ganas de vomitar… ¡Ay!, ¡ay!, ¿por qué? pensaba, ya que no podía hablar del dolor, de tan duro golpe; sentía que su desazón no tendría fin, no se tranquilizaba, solo el agotamiento lograba traer un pequeño descanso, pero casi seguido rebrotaba toda la desesperación, todo su dolor, sus gemidos, síntomas de la mas grande desolación, debido a sus nefatos pensamientos.
Pasaron los minutos, las horas hasta quedarse dormido en postura fetal en un rincón del sofá, allí lo encontró su compañero (pareja); aún su respiración entrecortada asemejaba a inconsolables gemidos, se le quedo mirando extrañado, sentía que algo no iba bien. La sospecha al verlo en esa posición y el lugar donde dormía, también le extrañaba su fuerte respiración y esos ruidos anormales que salían por su nariz y boca entreabierta. Dejo de mirarlo por un momento y empezó a observar a su alrededor, recorrió la casa sigiloso y se acercó al dormitorio compartido, sintió el impulso de llamar por teléfono y descolgó, colgándolo al instante entonces se fijo en el contestador y rebobino la cinta pulsando la tecla para escuchar los mensajes dejados: Sr Miguel le llamamos desde la clínica Orión para comunicarle que los análisis que nos pidió, ya tenemos los resultados, pero al ser estas pruebas nuevas y dar falsos resultados, hemos de realizarle nuevas pruebas para confirmar los resultados. Por favor pásese mañana sin falta por la clínica, el doctor Garcia Morata quiere verlo urgentemente, gracias.
- Autor: Soponcio ( Offline)
- Publicado: 13 de noviembre de 2024 a las 09:54
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 29
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., Antonio Pais, Sami Sanz, Alexandra L, Tommy Duque, Eduardo Rolon, Josué Gutiérrez Jaldin, Patricia Aznar Laffont, Fabio Robles, Soponcio, MonCiel, Llaneza, Lualpri, El Hombre de la Rosa, Jaime Correa
Comentarios2
Excelente prosa.
Entiendo que esperaba malas noticias y luego escuchó el contestador y la historia volvió a comenzar.
Un estilo de narración que atrapa.
Abrazo.
Gracias Patricia me alegro que te haya gustado. Un abrazo 🤗
Genial prosa literaria estimado poeta y amigo Soponcio
Muchas gracias Críspulo por tu comentario, saludos y feliz día.
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