El Mar se subleva, se vuelve hosco
por la ignominia del hombre ciego que no ve más allá
de su ombligo.
Ese hombre que le expolia las entrañas,
y en su útero evacúa sus miserias.
Olvidó el hombre, que en su inmensidad lo llevó más allá del horizonte,
que lo acunó como una madre amante y lo alimentó con el fruto de su vientre.
Se olvidó el hombre, que el Mar es el sustento de la vida,
agua que purifica la existencia,
el yodo con que cura sus heridas,
inagotable fuente del erario
que ampara el equilibrio de la Tierra.
Y a cambio,
recibe la infecta basura del descontrolado consumismo
profanando el maná de su matriz.
Pero cansado de tanto expolio, vomita plomo indigesto
y devuelve a sus playas parte del desecho hediondo con el cual el hombre lo bombardea y lo envenena sin piedad.
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Autor:
Rosario Bersabé (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 16 de noviembre de 2024 a las 07:08
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 35
- Usuarios favoritos de este poema: Alexandra L, Pilar Luna, Mauro Enrique Lopez Z., EmilianoDR, Josué Gutiérrez Jaldin, Eduardo Rolon, Soponcio, Classman, JacNogales, Miguel Ángel Miguélez, Ricardo Castillo., ElidethAbreu, Jorge Izquierdo, El Hombre de la Rosa
Offline)
Comentarios5
Reflexión que invita a detenerse en la contaminación de los mares, el peligro al que nos enfrentamos, porque cuando la naturaleza responda, puede ser el fin de la existencia, un llamado de atención, gracias por este tema de actualidad. Gusto leerte.
Saludos, feliz día, Alex.
El mundo había llegado a unos acuerdos por los que no se socavarían ni estropearían los fondos marinos, pues Noruega, que dicen ser muy ecologistas, no sé si ya los han empezado a horadar o están a punto, pero han aprobado la ley para extraer metales de los fondos marinos, y mira por donde es para emplearlos en las tecnologías verdes, es una ironía, pero después de esto ya se van a aprobar leyes internacionales para excavar los Fondos, y han dicho los ecologistas que eso va a ser un desastre para la supervivencia de la especies marinas.saludos.
La tragedia de Valencia tiene que ver con el cambio climático, no cuidamos el planeta. Buen poema Charo eso es lo que reivindicas en él. Saludos
Somos la peor de las plagas del planeta, pues lo que nos mueve es contrario a la naturaleza y esta a veces, a su terrible manera, se rebela...
Como bien dice el proverbio amerindio: "Solo cuando el último árbol esté muerto, el último río envenenado y el último pez atrapado te darás cuenta que no puedes comer dinero"...
Creo recordar haber leído que la isla de plástico del pacífico ya tiene una extensión de 2 millones de kilómetros cuadrados, y sigue creciendo gracias a nuestros desperdicios.
Muy buenos versos, Rosario.
Un abrazo!!
La belleza de tus versos y la genialidad que deja tu pluma llenan de belleza tu poema estimada poetisa y amiga Rosario Besabé
Recibe un fuerte abrazo de Críspulo desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
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