Testigos de nuestro amor
son las estrellas, el cielo,
el encinar, el robledo,
de las águilas el vuelo,
la hierba verde del suelo,
en primavera el deshielo,
el murmullo del riachuelo,
música de violonchelo,
el dulzor del caramelo,
y hasta el diablo cojuelo
que enredado entre tu pelo
te mostró como modelo
y de mis ojos el velo
quitó sin ningún recelo
alimentando el anhelo
de sentir tu terciopelo
aportándome el consuelo
de, en un mundo paralelo,
convertirme en tu gemelo
y también tu reyezuelo.
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Autor:
SERAFIN ZAPLANA (
Offline) - Publicado: 16 de noviembre de 2024 a las 16:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: EmilianoDR, 🇳🇮Samuel Dixon🇳🇮, Josué Gutiérrez Jaldin, Eduardo Rolon, Jaime Correa, Mauro Enrique Lopez Z., pasaba, El Hombre de la Rosa
Offline)
Comentarios1
Me imagino ese desvelo
y me quedo medio lelo...
Buena rima constante, algo machacona, pero muy ingeniosa. Me ha gustado el hecho de que mantiene la coherencia sin dejarse llevar por la rima, como muchas veces sucede... 👍
Un abrazo!!
Gracias Miguel Ángel
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