Hola - Chauuu
El poeta noruego Arme Garborg escribió: “Puedes comprar comida, pero no el apetito; puedes comprar medicinas, pero no la salud, camas cómodas, pero no el sueño placentero; libros, pero no la inteligencia; diversión, pero no el placer; votantes, pero no principios, ni fidelidad ni la PAZ”.
A los 17 años de edad, en una fuente de soda, asesiné en defensa propia a un individuo de unos 30 años, quién me empujó fuertemente al llamarle yo la atención por haber molestado a mi acompañante, una mujer bonita de unos 25 años, al darle un golpe cayó pegándose en el borde de la barra. Yo no sabía leer ni escribir. Pasado 40 años en la cárcel, 5 personas me entrevistaron para darme o no la libertad condicional.
Mi respuesta fue: no deseo la libertad, he pasado más de 2/3 de mi vida aquí, no sé desenvolverme fuera de este recinto, aquí fui violado a vista y paciencia de los gendarmes las 2 primeras semanas de haber sido internado, luego un señor piadoso y respetado me protegió, el era inocente de la muerte de su esposa como después se probó, ella tenía un amante quién cometió el crimen, pagó 20 años preso siendo inocente. Aquí, en la podredumbre completa de todo y todos, del sistema, me desenvuelvo; en esta escuela me he licenciado en el delito y académicamente. Qué pretenden, miserable, desvalido, prontuariado,... como estoy, me espera la muerte. No señores, les aseguro que me siento libre.
=================
De otra época:
Yo no te quise,
es cierto,
si no fueron 12 horas
el estar juntos,
sí, me gustaste;
qué te fijó a mi,
mi timidez,
el vivir en la calle desamparado y vulnerable,
la facilidad que tendrías para embaucarme,
mi juventud
o los chocolates y rosas que te ofrecí
al verte caminar hacia mí
preciosa, llamativa y perfumada;
cuánto te hubiese querido,
traviesa.
- Autor: Carlos Eduardo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de noviembre de 2024 a las 10:50
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: Josué Gutiérrez Jaldin, Freddy Kalvo, JUSTO ALDÚ, Menesteo, Mauro Enrique Lopez Z., Fabio Robles, Pilar Luna
Comentarios1
Cuánta razón tenía Arne Garborg en esas palabras pronunciadas. La libertad no te la dan ni te la conceden, es tuya y de nadie más.
Amigo Carlos Eduardo, a veces me encuentro perdido con tus escritos, no se si se refieren a ti, o son pensamientos filosóficos que no llego a entender.
Pero ahondo en tus escritos para obtener más conocimientos sobre los mismos.
Recibe un abrazo fraternal desde mi bahía gaditana.
Mi amigo querido, no escribo mi vida, no hago biografías mías ni de otros, sólo doy saltos intentando algo de belleza, realidad, profundizar, ir un poquito más allá, sondear si contengo algo propio, intransferible, porque al no contar con un microscopio más fino que la razón, las pulgas me parecen todas iguales...
Un abrazo enorme José
Amigo mío, esas inquietudes a las que te refieres, también hondan en mis adentros, quizás debiera yo de bucear más, en los pensamientos de aquellos que, quisieron dar alas a la libertad del hombre.
Un fraternal abrazo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.