Entre los que aún son hombres,
Yacen mis huesos abandonados,
Encarnados en cuerpo inerte.
Mientras me dreno de felicidad.
De los nacidos decido no ser,
La mente no me pertenece,
Mis palabras me insultan,
Y la realidad me golpea.
Mientras lo entregaba todo,
Todo me faltaba,
Insuficiente es mi existencia,
Deficiente es mi conocimiento.
El sol ha comido mi alma,
León me has quitado luz,
Remarcaste mi dolor,
Fingiste amor en nada.
Victoria en tu trono doliente,
Creí en tu mirada a mis ojos,
Era ilusión falsa como tu Dios,
Mi vergüenza aprovechaste.
Creció mi tormenta oscura,
Tus labras me dolieron,
Incapaz de fugarse fueron,
Mermaron mi seguridad.
"Lograste dolor en mí, aun sabiendo que estaba en catatumbas,
Creí en tu benigno velo y en tu rugido gatuno,
Mientras mi razón sabía de tu latido descorazonado.
Me hiciste saber que no soy lo suficiente
Porque me faltaba ser más humano de tu mundo".
"Desearía no ser humano, pero no por tus palabras y deseos,
Deseo dejar de ser humano porque me recordaste la razón de mi odio,
Me diste la razón,
Del por qué siempre soy apartado".
- Autor: Isaac Imos (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de diciembre de 2024 a las 01:10
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 13
- Usuarios favoritos de este poema: Josué Gutiérrez Jaldin, EmilianoDR, Llaneza, Soponcio, Mauro Enrique Lopez Z.
Comentarios1
Grato pasar por tus letras.
Que tengas buen día Isaac.
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