LECTURAS INMEDIATAS

Ana Maria Delgado

Tropieza, bajo el ambarino sol

suave a esa hora temprana

y se sobrecoge pensando

en que mas tarde,

sus fuertes rayos  

conspiraran, en burla,

con su estómago desocupado

y su pies cansados

haciéndole sentir,

con rigor, el peso de su cuerpo.

 

No queda huella de sus envidiables

furores de otros tiempos,

se menguó su fortaleza,

sus metas extraviaron la ruta,

se expatriaron fuera de sus dominios.

 

Condenó su vida

al arraigo absurdo

de recuerdos y tristezas.

 

Se entrega afligido

 a observar

la retorcida estructura de su vida

atiborrada de falsedades,

de frustraciones,

de sueños maltrechos, aniquilados.

 

Se apesadumbra

por su imaginación en declive,

por sus aspiraciones a la deriva.

 

Se concentra

en las formas próximas,

definidas e indefinidas,

móviles e inmóviles.

Intenta

abstraer su esencia,

….meta esquiva,

…las horas desertan,

la tarde muere,

las tinieblas gobiernan.

 

Su boca se cierra,

se esconde su voz,

su cuerpo languidece,

sus ideas se desvanecen

en las vías interminables

que se adormecen.

 

Cuando atisban los arreboles

de la madrugada,

se levanta,

y revisa el bosquejo

del calendario de sus días,

de sus años, de su vida.

 

Suspira

con la esperanza casi diseca,

casi marchita,

casi muerta,

con su humildad casi extinta.

 

Se ríe de su ineficacia

y pretexta

una despedida de esa vida,

de ese tedioso circulo de días grises,

que se repiten, incesantemente,

se aferra a conjeturar otras realidades.

 

Necesita un desenlace,

marcharse lejos de la confusión

de las miradas de burla,

de las lágrimas,

de los besos,

de las palabras,

de las caricias,

de los gestos,

de las posturas hipócritas.

 

Solicita la presencia de la lucidez,

el sosiego, la paciencia,

el coraje, para vagar

por la seductora región

de la alegría,

para desgarrar los tortuosos silencios.

 

Germinan interminables

ganas de cambio,

de refrescar su vida….

los gritos oprimidos

se liberan,

las lagrimas contenidas

se escurren por su cuerpo

agitándolo,

brota la llama de la esperanza,

y navega por su cuerpo,  

revive su sangre,

inunda sus carnes,

fertiliza el terreno de las ideas,

de las utopías.

 

Comienza a tejer el abrigo

de sus vivencias,

a sacudirse

de los brazos del sufrimiento.

 

 

 POR: ANA MARIA DELGADO P.

  • Autor: ANA MARIA DELGADO (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 6 de noviembre de 2010 a las 00:04
  • Categoría: Sociopolítico
  • Lecturas: 31
  • Usuarios favoritos de este poema: Mafeer
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Comentarios +

Comentarios4

  • Mafeer

    Excelente, poema me encanto todos necesitamos un cambio alguna vez, un cambio de actitud, de pensamiento y si ello nos ayuda a coexistir en un ambiente mas civilizado bienvenido sea!
    con su permisito me lo llevo a mi rinconcito
    Un Abrazo (:

  • Julio Cortazar

    El cambio es parte de la vida. Me gustó mucho tu poema.

  • YAXURE

    Los cambios siempre son buenos, solo nos falta animarnos porque a vece tenemos miedos de no poder seguir adelante con los cambios. si no funcionamos de un modo hay que buscas espetativas razonables y humanas.

    Te felicito

    Abrazos yaxure

  • Poemas de Pepita Fernández

    UN POEMA CARGADO DE TANTO SENTIMIENTO , DE DESGARRO Y DE ANGUSTIA POR EL DOLOR DE LOS QUE PADECEN SIN DEFENSA
    PRECIOSO POEMA , TE FELICITO CON MI ADMIRACIÓN , AMIGA POETISA
    UN ABRAZO



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