En las venas de la noche, corren ríos
terminales,
Soy un eco sin destino, perdido entre
abismales.
Mis sueños son cenizas, danzando en
fuegos fatales,
Mis pulsos sin sentido bombean banales.
El tiempo es un verdugo con cuchillos
letales,
Mis ganas de vivir se tornan
insignificantes.
En mi pecho se agrietan esperanzas
desiguales,
Camino por el borde de recuerdos
criminales.
En mi mente florecen jardines
espectrales,
Mi voz se apaga lenta en susurros
marginales.
En las sombras se diluyen mis promesas
ancestrales,
Tejiendo con sus hilos madrugadas
infernales.
Un océano sin luna me sepulta en sus
corales,
Donde ahogan mis latidos bajo mares
sepulcrales.
Lágrimas de invierno caen en noches
espectrales,
Dibujando cicatrices en mis brazos
glaciales
Soy un náufrago perdido entre olas
colosales,
Con los labios sellados por silencios
abismales
El horizonte sangra con colores
invernales,
Mientras busco en el vacío respuestas
siderales
Cada aliento se consume en fuegos
intangibles,
Y en mi piel se deshojan recuerdos
invisibles
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Autor:
v10l3t4_0 (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 9 de diciembre de 2024 a las 21:56
- Categoría: Triste
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: Josué Gutiérrez Jaldin, nachosol, SOY.-, Mauro Enrique Lopez Z., EmilianoDR, alicia perez hernandez
Offline)
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