Escucho el canto de campanas,
cómo sentencia del viento,
a mis recuerdos enmohecidos,
transpirados de musgo y caminos,
de histerias y vanidades,
de horas suplicantes,
y entrañas desesperadas.
Campanas de voz grave,
revelando los veredictos del tiempo,
advirtiendo a los huesos viejos,
que de rodillas no se regocija la vida,
que dentro del alma no hay pecados,
sino vivencias enardecidas,
que no demandan candelabros ni confesionarios,
sino ojos atrevidos.
Escucho campanas afligidas,
soñando con luz y fuego,
escarbando bajo la piel,
cronologías de pasiones y entregas,
besos y lágrimas,
gotas de sangre que fertilizan las manos,
para sembrar flores sobre peñascos y arenas.
Campanas del tiempo, ciegas, sin espanto,
con el eco de montañas y ríos,
de hojas secas,
de lo que fuimos,
de sueños sencillos,
de noches sin quebrantos,
de albas y esperanzas,
de consuelos y cantos.
- Autor: Jose Barrientos (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de diciembre de 2024 a las 13:54
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: JAGC, Andy Lakota👨🚀, Mauro Enrique Lopez Z., alicia perez hernandez, Lualpri, El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Hermosa composición, gran poeta Barrientos.
Me gustó mucho.
Felicidades.
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