No te quiero.

Y no quieres mi ausencia, ni mis palabras, muchos menos abrazar mis sueños.

Quieres mi cuerpo, quieres el cascarón de lo que sujeta a mi interior.

Eres vanal y cruel.

No quieres quererme; como se quiere moralmente, me das repudio y ocaso.

Me das la mano entre las calles, tratando de apaciguar las calumnias que me has hecho sentir en este noveno mes.

Y me tomas de la cintura mientras caminamos sobre la acera,

pero simplemente

somos 2 transeúntes más.

Y reafirmo que no te quiero y no me quieres.

Hay un poco de ruido a nuestro alrededor que adorna mi espera por ti

el canto de las aves, las campanas de la iglesia y las cadenas de las bicicletas.

Y te acercas

Vienes

Sin ser

Apresurado, sin pedir explicaciones.

Me siento "bien", me río, me tomas del cabello.

Me besas

Me mimas

Me abrazas 

Y yo

Te tomo del cabello

Te beso

Te mimo 

Te abrazo

Y el tiempo se detiene por un instante 

Tan inexplicable pero existente.

Y no te quiero, tampoco me quieres, no nos queremos

Pero

Quieres apagar la hoguera de tus ojos, sobre mi ser 

Y

En la frivolidad de tu mirada, escurrir tus deseos más ocultos.

Me quieres en ese instante

pero yo

No te quiero.

Me divierto besandote la boca, tomándote la mano y

Reafirmando con la cabeza que no

no te quiero,

porque soy taciturna.

Coincidimos en la misma calle a la misma hora

Pero.

Solo ansias mi carne y mi calor.

Y

no imaginas que ni siquiera te dejaré verme el alma.

Porque

No te quiero y

No me quieres.

Porque 

Esa 

Soy yo.