(Uno)

“Se escuchó su primer llanto

y la arena del desierto

murmuró:

“Todo nace aquí”.

Una luz emerge en el silencio

más hondo,

un anciano la entregó

sin hacer preguntas,

parecía estar todo escrito”

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Al alba,

una tormenta de arena

después, nada cambia,

como si el pueblo fuese de arena.

Sus ojos recién abiertos

bebían la luz del desierto.

Nuestros ojos se abren

por vez primera

beben la claridad del lugar,

pero la realidad inestable

se apega a tu alma,

como un tatuaje invisible.

¿Cuál son los trazos hundidos en tu alma?

luego, te conviertes en el arquitecto de tu vida.

A sus pies de recién nacido

una serpiente gira en una danza,

el hábitat esculpe tu resistencia

como una rosa, sus espinas.

En el desierto la arena te envuelve

como tu piel,

el viento te trae el canto,

como en la ciudad,

el caos te hace girar,

tus manos se sueltan y caes.

¿Cuál es el lugar de tus semillas?

Inicias un viaje

el pasado se apega a tus espaldas,

¿Un pasado que aún no existe?

Es la primera herencia de un silencio

y son tus primeros pasos en este desierto…