Regresaré pronto...
Estoy huyendo de mí,
y en esta fuga me siento libre.
Me pierdo en los rincones
de tantas ciudades cruzadas,
y mi paso, gozoso y descubridor,
pisa aquello que, a diario,
la premura ignora.
Soy el navegante
que sigue migas en los océanos,
trazando rutas de ida y vuelta.
Nada es nuevo,
salvo lo que no se recuerda.
Me queda este déjà vu
anudado entre memoria
y sueño.
Escuché el canto de Orfeo,
seguí la senda pitagórica,
y mordí el fruto prohibido.
Heme aquí,
pagando con la vida,
encontrando lo perdido,
lo que no debía volver a ver.
Soy el extranjero
de mi propia memoria:
preso en días de sol y lluvia,
y otras veces, en los grises días
de afilados fríos.
Gozando del cansancio del día
y de la noche alzada.
Todavía miro con los ojos apagados,
me sigo sin pies,
y lanzado al camino,
olvido lo olvidado,
aquello que el vulgo dejó de ver.
No tengo carga ni posesiones.
Pero,
dadme una pluma,
y sabré regresar
por mí:
para trazar líneas fallidas
sobre la razón.
Ahora yazco aquí,
perdido,
alegre de no encontrarme
y de haber olvidado
todo lo que quise perder.
Dejadme sin memorias,
sin lengua
y sin dedos,
para no regresar más.
- Autor: Axioma (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de diciembre de 2024 a las 01:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: Josué Gutiérrez Jaldin, alicia perez hernandez, El Hombre de la Rosa, Mauro Enrique Lopez Z., Paris Joel, Hugo Emilio Ocanto, JAGC, EmilianoDR, Llaneza, gaspar jover polo, rosi12
Comentarios3
Genial tu versar estimado Santiago Castillo
Un abtraza de Críspulo
El Hombre de la Rosa
Hola, amigo Críspulo. Gracias por leerme; recibo con alegría tu abrazo y te envío de vuelta uno igual de cálido.
Muy bueno Ricardo! Sobre todo la última estrofa. Abrazo.
Hola Paris, me alegra que te haya gustado, especialmente esa parte. Un abrazo de vuelta.
Me parece que el componente filosófico es importante en este poema. Y eso me alegra porque pienso que el pensamiento filosófico, intenso, comprometido con el análisis de la realidad es un componente importante en la lírica que se está perdiendo un poco hoy en día.
Estimado poeta:
Muchas gracias por tu reflexión. Coincido plenamente contigo: la poesía y la filosofía comparten una conexión íntima. Ese diálogo entre la lírica y el pensamiento filosófico es necesario en un tiempo donde predomina lo inmediato sobre lo reflexivo. Aunque lo mío no es más que un humilde intento, procuro buscar y explorar esa conexión. Que la poesía continúe siendo un espacio para cuestionar, analizar y trascender la realidad. Abrazos.
Firmo debajo de esta estupenda explicación.
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