Amor glorioso
A veces creo que yo nací, vine a este mundo…
con la única e importante misión de adorarte.
El destino sabe que soy serio y meditabundo,
y me encomendó la armoniosa tarea de amarte.
Posiblemente antes de nacer, allí en el éter,
pasaría un examen para convencer al jurado,
no recuerdo como me lo hicieron prometer,
pero lo que entonces juré, no lo he olvidado.
Y la verdad es… que me resulta muy agradable,
cuanto más te veo, y más te trato, más te quiero.
Ojalá que todo en la vida me resultara tan viable,
otras cosas sin embargo las sufro con desespero.
Pero hablemos de ti, de la misión de la que presumí.
La verdad es que no me lo pones nada fácil, cariño.
Parece como si a ti, en aquel mismo sitio que a mí,
se te hubiera encargado tratarme como a un niño.
No acabo de entenderlo. ¿Acaso para ganarse el cielo
hay que pasar esta prueba? Si así fuera, platiquemos;
pues nos lo estamos ganando con cierto desconsuelo,
especialmente yo, que quiero amarte, que nos amenos.
Yo seré tu cielo y tú el mío, uno al otro nos encielaremos…
mutuamente, pondremos techo sobre nuestras cabezas,
viviremos el amor, y enamorados, la vida saborearemos,
seremos libres y más naturales que todas las naturalezas.
Te quiero cariño, quiéreme también tú a mi… igualmente,
juntemos nuestras dos vidas y hagamos una sola.
Vivamos esta nueva vida de forma cordial y excelente,
¡Alcancemos juntos la gloria, disfrutemos alcanzándola!
- Autor: José Fas Fonfría ( Online)
- Publicado: 22 de diciembre de 2024 a las 03:15
- Categoría: Amor
- Lecturas: 1
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