No hay mayor desespero que cuando
Hasta la soledad marcha y aquello
Que viene quiere quedarse.
¿A quién le cuento cuando mi voz reposa?
Muerta no quiere, quiere para la vida
Como hace la noche ahí arriba.
Podría apostar por nacer de nuevo
Pero sería volver a convertir en paloma
La memoria y justificar los labios
Siempre al azul.
No quiero decir -nadie-, no quiero
Decir - nada-, quiero decir que crezcan
Como cuando niño las cosas
En una pizarra y no llorar la voz en voz baja.
Que no se vaya, no; que llame a mi puerta
La mano, y esa mano no sea pluma enjaulada
Y sí carbono que de las sombras cuenta
Un cuento a nieve en calma.
No quiero que la grasa de mis dedos
Se marchen sin lágrimas, así a mis manos
Se le llamen manos y no apéndice
Que masa guarda.
Que corra, que corra el agua, que en el deseo
De mí voz se pongan de acuerdo piedra y montaña.
- Autor: Lakota (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de diciembre de 2024 a las 12:14
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: Alexandra L, Pilar Luna, nachosol, Josué Gutiérrez Jaldin, JAGC, Mauro Enrique Lopez Z., Tommy Duque, EmilianoDR, WandaAngel, Texi, Martha patricia B, MISHA lg, alicia perez hernandez, ElidethAbreu, pasaba, Gloria Villanueva, 🇳🇮Samuel Dixon🇳🇮
Comentarios1
Sencillamente hermoso Andy, un gusto leerte, gracias por compartir.
Saludos, que tengas un lindo dia, Alex.
¿ para qué más si nacemos sin nada?
Gracias a ti, amiga.
Saludos de lo lindo también para ti.
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