¡Luna!
Tú que alumbras mis calles,
Y que la alumbras a ella...
Te hablo a tí mi luna de plata,
Te hablo a tí mi doncella.
Que con tu luz
Los semblantes se alegran.
No brillas para nadie
Sino brillas para ti...
Que con tus brillos
Las calles se ríen,
Y saltan de gozo
Los corazones en pena.
No brillas por aquellos
Que te admiran y te piden,
Sabiendo que es imposible que bajes,
Porque eres luz incomparable.
Tú mi luna,
Que sobre ella estás,
Que noche tras noche la ves,
Dile que éste noble corazón,
En ella se posa mi querer.
Que al haberse ido se murio mi ser,
Pero aún no ha muerto este querer...
Tú que eres mi testigo
Sabes lo que digo,
Mi luna,
Que me ves llorando
Como cuando el lobo maúlla.
Te pido me detengas,
Antes de que yo cometa una locura,
Como ahogarme en este vaso de amor
O tirarme al vacío de la locura.
Y es que muerto ya estoy,
Por amarla, a pesar de ser
"tortura"
- Autor: David I. R. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de enero de 2025 a las 13:13
- Categoría: Amor
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: nachosol, Sierdi, JUSTO ALDÚ, WandaAngel, EmilianoDR
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