Mirando el recuerdo de mi adolescencia,
igual que calido y árido desierto,
casi siempre alucinando; muy despierto.
vislumbrando con ahínco mi existencia.
Del sol sentí su prudente y tierno abrazo,
Los rayos, calor, como consejo tenue.
Observa todo; ¡ Ay de tí! si no te mueves,
tan sólo de mí sentirás el rechazo.
Corre, anda vé, busca, disfruta el oasis,
medita buscando en tus noches serenas
disfruta el aroma de las azucenas
y ve sabiendo que esta vida es un éxtasis.
Guarda siempre de las flores el rocío,
pues sin ellas; te sentiras muy vacío.
Dr. Salvador Santoyo Sánchez
16/01/2025
- Autor: Salvador Santoyo Sánchez (Seudónimo) ( Online)
- Publicado: 19 de enero de 2025 a las 19:13
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, JAGC, José López Moreno., Jaime Correa, Mauro Enrique Lopez Z., Josué Gutiérrez Jaldin, Ed-win, nachosol, Llaneza, Una voz, Freddy Kalvo, Javier Julián Enríquez, EmilianoDR, Violeta, pasaba
Comentarios2
Razón tienen tus letras Salvador!
Gracias.
Un abrazo.
Es un poema para meditarse. Si bien la vida contiene belleza, es innegable que tiene también crueldad y es despiadada, y esa parte de la vida no nos ha inspirado belleza, mas si asombro, como los cuadros de Zdzisław Beksinski. Ante tal peso, una flor en el jardín, perfumada y húmeda es un bálsamo potente, el truco yace en saberlo reconocer. El tiempo borra lo mejor de nosotros, a menos que sepamos llegar añejos al final del camino.
Dios te bendiga amigo poeta.
Gracias por estar y leer.
Tienes razón en tu comentario.
Recibe mi saludo sincero.
Bendiciones amigo poeta UNA VOZ
Las pinturas a las que haces referencia, del pintor polaco Beksynsky, no son de mi agrado, pero son interesantes.
Muestran un distorsión de las cosas que ocurren en la vida.
Pero con una visión tal vez Dantesca.
Prefiero imaginar una realidad más amable y placentera
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