MIGRANTES

Pasaba por aqui, como un perro callejero pasa por la acera que da a tu ventana,

sin importarle un pito quien le mira o arroja migajas duras.

Las pisadas no hacían ruido, no para no molestarte,

sino porque andaba descalzo como siempre.

El frio no molesta, no porque sea verano,

sino porque la pelambre le protege.

Ha dejado atrás la mansedumbre, 

para acorazarse en este transitar peligroso.

Huir es la moda del siglo,

buscar al castigador

el destino,

hasta hacerle la vida imposible.

Busca lo que es suyo,

el mendrugo que le ofrecen,

para enfrentar la vida

que cada día encarecen.

Son temerosos de su transitar,

pueden cambiar el mundo,

pero sólo buscan refugio

en la tierra del que los desgració.

Soportan el dolor y la muerte estóicamente, 

de sus paises hablan pestes, 

pero allá dejaron el alma,

y el cuerpo va en pena.