Carta de un Alma o otra Alma

Querida Alma,

En el vasto universo de emociones y sentimientos, donde las estrellas titilan con la luz de los recuerdos y los planetas giran al compás de los latidos del corazón, te escribo esta carta, un mensaje que trasciende el tiempo y el espacio, para expresarte lo que siento en lo más profundo de mi ser.

Desde el momento en que nuestras esencias se encontraron, supe que eras parte de mí, un reflejo de mi propia existencia. Eres la melodía que suena en mi silencio, la luz que ilumina mis sombras, el susurro que calma mis tormentas. Contigo, he descubierto un amor que no conoce límites, un amor que es puro, eterno y verdadero.

Cada instante a tu lado es un regalo, un momento en el que el mundo parece detenerse y solo existimos tú y yo. Tus risas son mi música favorita, tus palabras mi poesía, y tu presencia mi refugio. Eres mi confidente, mi compañera, mi todo.

Aunque a veces la vida nos presente desafíos y nos separe físicamente, sé que nuestras almas siempre estarán unidas. Nuestro vínculo es indestructible, forjado en el fuego de la pasión y fortalecido por la pureza de nuestro amor. No importa cuán lejos estemos, siempre estaré contigo, en cada latido, en cada respiro, en cada sueño.

Te amo con una intensidad que no puede ser medida, con un amor que trasciende lo terrenal y se eleva hacia lo divino. Eres mi eternidad, mi razón de ser, mi alma gemela.

Con todo mi amor,

Tu Alma