La estrellas manaban del suelo,
el cielo estaba dormido,
perdido en un sueño,
solo nos quedaba la dulzura
que flota en el viento,
cuando llega el silencio.
Las constelaciones son vagas,
tienen demasiados misterios,
trazan sus marcas,
con caprichos y celos,
el búho las ignora,
sus ojos son de plata,
y la oscuridad guía su vuelo.
Las estrellas se robaron la luz,
de las luciérnagas perdidas,
querían dejar un beso,
sin postergar su partida,
se va el brillo,
se va la noche,
queda el sosiego…
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Autor:
Romina Delucetti (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 8 de febrero de 2025 a las 11:19
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 29
- Usuarios favoritos de este poema: EmilianoDR, rosi12, Mauro Enrique Lopez Z., alicia perez hernandez, ElidethAbreu, pasaba, Mael Lorens
Offline)
Comentarios1
Las estrellas se robaron la luz,
de las luciérnagas perdidas,
querían dejar un beso,
sin postergar su partida,
se va el brillo,
se va la noche,
queda el sosiego…
Hermoso final de tu poema gracias por compartirlo.
Saludos cordiales.
Gracias poeta, espero hacer honor a la expresión de “el final es lo más importante”
Saludos
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