TUS LETRAS Y MI CANCION

Me gusta la variedad de sensaciones que vienen a mi almohada, cuando tus palabras se meten en mi corazón donde reposan los recuerdos, trayendo piezas de felicidad que, al leer, se acomodan como piezas de un lindo rompecabezas, ensamblando cada pieza, con una letra, un sueño o las variadas imágenes que acompañan la mayoría de tus poemas.

Dicen que las letras no tienen rostros, que son solo piezas de un alfabeto y que un soplo de viento interviene para hacer de una pequeña chispa un gran incendio. Cuando esas piezas como flecha de cupido dan en el centro de un oscuro sentimiento que estaba siendo alumbrada y nerviosamente da brillo a sus ojos y ese color manzana a sus graciosas mejías

Es maravilloso el impacto de tus letras que desde el principio he querido esquivar. Me gustaría leerte, como se lee el estado del tiempo y solo murmurar …  mmmm hará frio, que bien, Sin embargo, mueves todas mis neuronas y la lucha entre la dopamina y serotonina, mueve mi pluma y vuelvo a conversar con tus letras y darles continuidad a nuestros sueños

En tus letras encuentro todo lo que un gambusino literario puede buscar y encontrar en el rio de los sentimientos. Una pieza de ese kilate de cada letra que bien acomodas quien sabe para quien, y que cada día me lo apropio y busco señales en tu imagen, interpretando cada milímetro de esa foto con una meticulosidad de un analizador de fotos Snappr.

A veces me ayudan mis poetas favoritos, para calmar la revolución de mis neuronas y neutralizar mi transito sanguíneo y mis sueños vuelvan a la tranquilidad de mi almohada y de nuevo esperar otro día y que los cantos de aves me sugieren los tonos exactos de la canción con la que envolvería el poema que hare llegar a tu portal y dejare en tu ventana

LENNOX

EL QUETZAL EN VUELO