La mañana despliega sus alas de luz,
un lienzo de promesas, un despertar sin fin.
El amor, como un río, fluye en el paisaje,
un torrente de pasión que enciende el alma.
El sol, un beso cálido en la piel,
despierta la tierra, un jardín de miel.
La naturaleza, testigo silencioso,
nos abraza en su danza misteriosa.
En el silencio del alba, un canto emerge,
un te quiero que el viento recoge.
Las montañas, guardianes de secretos,
guardan el eco de nuestros afectos.
No hay caminos extraños, ni valles vacíos,
si el amor nos guía, todo es posible.
En tus ojos, encuentro mi reflejo,
un universo de emociones, un eterno juego.
En mi corazón, tu nombre resuena,
un latido constante, una llama que no se frena.
Eres mi alegría, mi sueño dorado,
el amor que me inspira, mi eterno legado.
© 2025 Oney CF.
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Autor:
Oney Cabrera Felizola (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 14 de febrero de 2025 a las 09:09
- Categoría: Amor
- Lecturas: 20
- Usuarios favoritos de este poema: EmilianoDR, Mauro Enrique Lopez Z., alicia perez hernandez
Comentarios1
Que grandioso despertar poeta Oney.
Me ha gustado tanto leerte.
Feliz 14 de Febrero amigo.
Saludos cordiales.
Gracias a ti amigo, también poeta Emiliano leo tus poemas són muy buenos.mis afectuoso saludos para usted y su familia.
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