Fuego inútil

Pablo Alfonso



Tus labios me escupen el odio,

como quien arroja pájaros muertos al viento.

Dices que me odias. Lo repites,

y tu voz me atraviesa la piel

como un cuchillo que no sangra.

Pero yo te amo,

con la obstinación de los locos

y la fe de los náufragos.

No te amo con el corazón,

porque el corazón es un músculo torpe

y yo te amo con el hambre,

con el frío,

con la ceniza que deja el incendio

cuando ya nadie mira.

Tu odio es un bosque en llamas,

pero yo camino descalzo sobre sus brasas.

La flor del aire,

la ola que rompe el horizonte,

la cruz de los árboles mutilados

se consumen en mi incendio.

Y aun así, ingrata,

sigo soñando entre tus cenizas.

Porque, ¿qué me importa que no me quieras

si en mis manos arde

suficiente fuego para los dos?

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.