Elegía de un amor

No rehúyes al amor, no temas perder
la libertad que tu alma anhela tener.
No intento atarte con cadenas de pasión,
solo un efímero instante de dicha en tu corazón.

No esperaba que mi dolorido ser
en tu dulce presencia pudiera hallar solaz.
Eres de aquellas almas que jamás podré olvidar,
imposible alcanzar el encanto que te hace singular.

Aquel encuentro fortuito, destino quizás,
iluminó mis ojos, mi sendero en la oscuridad.
No imaginaba que tu luz, cual estrella fugaz,
guiaría mis pasos hacia un nuevo despertar.

Pero tu alma, cual fortaleza inexpugnable,
se resguarda del amor, vulnerable.
Murallas de desengaño, heridas del ayer,
impiden que mi afecto pueda florecer.

Ahora mi camino florece, la noche se desvanece,
tu lumbre me cobija, mi espíritu en ti se mece.
No te pido que te quedes, solo déjame amar,
tu libertad intacta, mi amor sin igual.

JTA.