Vendrá engalanada con luto y misterio,
con hálito frío y beso certero,
con manos de mármol, con paso funéreo,
y en muda caricia me hará prisionero.
Cuánto la aguardo, mi dulce condena,
mi cita postrera, mi amante segura.
Ninguna me quiso con tal inclemencia,
ninguna fue nunca tan fiel a su altura.
Me ha visto en mis horas de sombras y duelo,
me ha dado su aliento cuando otros partían,
ha sido la única en todo este cielo
que nunca traiciona, que nunca se olvida.
Que vengan los necios con llanto mezquino,
que tiemblen de espanto, que huyan cobardes.
Yo brindo a su nombre, yo espero su signo,
pues nadie me quiso tan hondo y tan grande.
Y cuando ella llegue, me vista de sombra,
me ciña en sus brazos con gala infinita,
diré con un beso que todo se ahonda,
de todas mis citas… la única escrita.
-
Autor:
El Corbán (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 24 de febrero de 2025 a las 17:36
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 27
- Usuarios favoritos de este poema: JAGC, MISHA lg, ElidethAbreu, WandaAngel, alicia perez hernandez, Ricardo C.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.